Como parte de la reestructuración de la empresa y de la drástica caída en la demanda, especialmente en vuelos internacionales y tráfico corporativo, Alitalia suspendería sus servicios aéreos desde y hacia el aeropuerto Malpensa (MXP, según su código IATA) de Milán. De confirmarse, a contar del 1º de octubre, todas las operaciones hacia esa ciudad se realizarán desde el aeropuerto Linate (LIN) quedando dependientes del funcionamiento del hub en Roma (FCO).
Según el entorno aeroportuario, la decisión responde a la imposibilidad de reanudar el tráfico por los bajos niveles de demanda y por las operaciones específicas que Alitalia posee desde ese terminal aéreo. De esta manera, las últimas operaciones finalizarían el 30 de septiembre y dejarían sin efectos los planes de recuperación anunciados para octubre en las rutas internacionales que dispone todavía, al menos en la programación.
La operación de Alitalia en Milán se distribuye en dos aeropuertos: Linate para vuelos domésticos, incluyendo el puente aéreo con Roma (FCO) y para vuelos europeos; Malpensa dedicado para vuelos internacionales específicos, a pesar de que alguna vez el aeropuerto se diseña para ser hub de la compañía. Hasta ahora, Alitalia mantenía dos enlaces estratégicos desde Milán (MXP) hacia Nueva York (JFK) y Tokio (NRT), además de conexión con Roma (FCO) en carácter de alimentador.
Con el nuevo esquema de operación, el servicio de Alitalia queda concentrado en Milán (LIN). Si bien se puede considerar como un retroceso en la oferta, brinda oportunidades para reducir costos en una empresa aérea prácticamente en quiebra y dependiente de las ayudas públicas que en varias oportunidades viene consiguiendo, la última bajo justificación de la paralización por parte del Estado por la situación del COVID-19.
En círculos italianos no dan por terminada la operación de Alitalia en Milán (MXP). Argumentan que no es la primera vez que la compañía se retira de ese aeropuerto para posteriormente reactivar rutas. Si se confirma, esperan que la recuperación de la demanda en los próximos años pueda incentivar a retomar los vuelos.
Si bien todas las líneas aéreas internacionales, especialmente las no europeas, operan en Malpensa demostrando la existencia de una demanda, Alitalia no precisa de esa operación en ese aeropuerto dado que posee el centro de conexiones de Roma (FCO). Desde ahí puede alimentar a la ciudad lombarda incluso con más oferta a través de los vuelos que opera desde Linate, aeropuerto desde conecta también a otras ciudades italianas y europeas.
No se descarta que la variable política también influya en una marcha atrás de esa decisión. Algunos cuestionamientos demandan la mantención de los servicios dado que la empresa se está financiando con recursos públicos, especialmente de la región de Lombardía que forma parte de la región industrial de Italia.
Si se confirma la salida de Alitalia, el aeropuerto Malpensa quedará sin líneas aéreas estrictamente italianas por primera vez desde 1948 y dependiente exclusivamente de operadores internacionales. Ya en 2019, el terminal aéreo ve reducido su potencial con la quiebra de Air Italy que consideraba sus instalaciones como base y hub para todos sus vuelos domésticos e internacionales. Durante la paralización de vuelos intercontinentales de Alitalia, las operaciones de la entonces Meridiana (nombre anterior de Air Italy) mantenían la presencia nacional. Actualmente, la única compañía que mantiene base en ese aeropuerto es easyJet.
Fotografía portada – Milano Malpensa Airport