Pruebas rechazadas del sistema de equipaje retrasa inauguración del T2 del aeropuerto de Santiago

Pese a que la infraestructura está lista, pruebas rechazadas en el sistema de equipaje (BHS, por sus siglas en inglés) están demorando la entrega y puesta en servicio de la terminal 2 del aeropuerto de Santiago. Las partes involucradas, incluyendo el Ministerio de Obras Públicas (MOP) confían que se podrá entregar antes de fin de año.

Según publica diario “La Tercera” (19/11/2021), el nuevo sistema de manejo de equipajes es el causante de las demoras. La razón está en la continuidad de las pruebas operacionales, de verificación y habilitación de los procesos (conocidas como ORATs, por sus siglas en inglés). De acuerdo con dicho medio, la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) habría realizado observaciones tras calificar de insuficiente el manejo del equipaje facturado.

El nuevo sistema de gestión de equipaje es una de las “estrellas” de la T2. A diferencia del actual, posee un circuito completo de cintas que finalizan en ocho islas donde los pasajeros recogerán sus maletas. Todo el equipaje facturado será revisado por el control del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) y Aduanas bajo el edificio de manera que el pasajero no tendrá que estar sometido a filas y revisiones a su llegada al país. Las revisiones a los pasajeros sólo procederán si hay alertas.

Con las mejoras, se espera incrementar el procesamiento de equipaje pasando de 1.500 maletas hora a alrededor de 4.000 por hora. Los procesos de llegada de pasajeros también se beneficiarán dado que no hay filas después del control de inmigración. Las estimaciones indican que una salida expedita podría tomar hasta tres minutos en comparación a los 45 minutos o más que tarde una persona en salir en la actualidad en condiciones normales.

Las pruebas aplicadas por parte de la autoridad están rechazadas. Se infiere que no se estarían cumpliendo con los estándares para su correcto funcionamiento. Por consiguiente, se deben efectuar las correcciones correspondientes y someter a nuevas pruebas hasta que se compruebe que los sistemas están en condiciones óptimas para funcionar. El BHS es un equipamiento indispensable en el funcionamiento de cualquier aeropuerto.

Consultado por Aero-Naves respecto a las inconveniencias del BHS, las acciones correctivas y los tiempos de puesta en servicio, Nuevo Pudahuel responde que la obra de construcción de la nueva terminal internacional (T2) fue completada, a través de la constructora CJV, dentro del plazo establecido, en septiembre pasado. Desde entonces, el MOP y la DGAC realizan pruebas a diversas tecnologías, como el BHS, un sistema que aumenta y optimiza considerablemente la seguridad y capacidad para procesar equipajes, en relación con lo conocido en el actual terminal.

La sociedad concesionaria integrada por Aéroports De Paris (45%), Vinci Airports (40%) y Astaldi Concessioni (15%), agrega que todavía está pendiente la instalación de los servicios públicos en el nuevo recinto, además de indicar que el Gobierno debe definir la fecha de inauguración. “Aún está pendiente la instalación de los servicios públicos en el nuevo edificio. Con ello, la autoridad puede dar curso a la puesta en servicio, que permitirá inaugurar el terminal, en una fecha que debe ser definida oficialmente por el Gobierno”, expresan.

¿Nuevas diferencias?

La relación entre el Ministerio de Obras Públicas (MOP) y Nuevo Pudahuel no han sido fáciles. Lo anterior, queda reflejado en número considerable de diferendos entre ambos partes realizados a través del Panel de Técnico de Concesiones, organismo técnico encargado de dirimir las controversias. A la fecha, la más importante que mantiene Nuevo Pudahuel con el Estado chileno es ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias (CIADI) por la negativa del MOP de extender el contrato de concesión por los daños provocados por las restricciones impuestas por el Gobierno de Chile durante la pandemia.

La explicación respecto al BHS también sugiere opiniones distintas entre la parte pública y la privada. En base a lo expuesto, no queda claro la actual situación de las partes, más allá de indicar que los ensayos no dan los resultados óptimos para su puesta en funcionamiento.

Más de 70 días de retraso tiene la inauguración de la terminal 2 del aeropuerto de Santiago. El periodo, se agrega a los retrasos anteriores considerando que los planes iniciales establecían que la nueva infraestructura debía comenzar su puesta en servicio en julio 2020. A la fecha, sería más de un año y medio de demoras. Por cada mes de demora, el MOP puede cursar infracciones que pueden llegar hasta el US$1 millón.

Interior terminal 2 – Fotografía Ricardo J. Delpiano

Terminal 2

Cuando se inauguren las nuevas dependencias, el aeropuerto de Santiago contará con más de 350.000 metros cuadrados (m2) y su capacidad permitirá procesar a más de 30 millones de pasajeros. Para construcción y funcionamiento dispone tecnología de última generación en todos sus sectores, que ya están incorporados en muchos aeropuertos de la región y el mundo.

El antiguo edificio pasará a ser conocida como la terminal 1 (T1) y contará con dos espigones (A y B) más una gran sala de embarque para atender sólo a los vuelos nacionales. El nuevo complejo corresponde a la T2 para vuelos internacionales. Se compone de un edificio principal (procesador central) desde donde salen cuatro edificios menores o espigones (C, D, E y F) que albergan las salas de embarque.

En el procesador central hay 96 de counters de check-in y 64 puestos de auto entrega y etiquetado de equipaje, más la habilitación de 176 módulos de chequeo de pasajeros. Con puestos para control de migraciones y revisión de seguridad (AVSEC), los tiempos de espera en fila también debieran reducirse, siempre y cuando, los organismos públicos colaboren al dotar de personal suficiente para el flujo de pasajeros y en los horarios que correspondan.

Para la conectividad con la ciudad se disponen de 5.800 plazas de estacionamiento de vehículos, cifra superior a las 3.730 del ahora antiguo aeropuerto. Además, existirá un centro de transportes que cuenta con una terminal para 26 buses interurbanos.

Debido a la reducción del tráfico de pasajeros internacional y de la capacidad por parte de las líneas aéreas, la apertura de la T2 será parcial. En la publicación de “La Tercera”, se indica que sólo funcionarán dos espigones en lugar de los cuatro. No está claro si serán los C y E que ya están en funcionamiento o se incluirán los nuevos D y F.

Fotografía portada – Ricardo J. Delpiano

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