Pese a los inconvenientes presentados, el Pentágono entrega un fuerte respaldo a Boeing con un contrato por 19 KC-46 de los cuales 15 serán entregados a la Fuerza Aérea de los Estados Unidos (USAF, por sus siglas en inglés) y otros cuatro a Israel. La decisión busca asegurar la producción y con esto mantener las fuentes de trabajo que aportan a las economías locales como del país.
El valor estimado del contrato es por US$3,1 mil millones. De estos, US$2,2 mil millones corresponden a la producción de las aeronaves estadounidenses cuya fabricación se realizará en Seattle. En el caso de la Fuerza Aérea de Israel (IAF), la compra de los aviones cisterna tiene un valor no superior a los US$927 millones.
Lote 8
Los 15 KC-46 adicionales se asignan al lote de producción número 8 para la USAF. Es el último grupo de producción de la aeronave y se produce casi 20 meses después del lote 7 de enero de 2021. El lote 7 actualmente en curso comprende también 15 aviones con un valor estimado en más de US$2,1 millones.
Las entregas de las 15 aeronaves están sujetas a los trabajos para encontrar una solución al problema en el sistema de visión remota (RVS). Las fallas con apagones en las pantallas o desvanecimiento de las imágenes causados por sombras o la luz solar impiden que la aeronave sea autorizada para operaciones de combate.
La USAF trabaja con Boeing en un sistema denominado RVS 2.0 para reemplazar al actual. El diseño de este nuevo equipamiento está aprobado desde abril, pero la instalación recién podría darse hacia 2024. El fabricante estadounidense se hará cargo de las actualizaciones correspondientes como parte de una compensación por los inconvenientes presentados.
Las entregas del último lote del KC-46 están contempladas para 2026.
Israel nuevo operador KC-46
Después de Japón, Israel es el nuevo operador del KC-46. La decisión no sorprende por las relaciones políticas existentes entre Tel Aviv y Washington y se dan en un contexto de dotar a la IAF de una capacidad polivalente para enfrentar nuevas amenazas, principalmente, desde Irán, según autoridades israelitas.
El interés de Israel en el KC-46 no es nuevo. Sin embargo, su incorporación se ve amenazada por la demora en la aprobación correspondiente por parte del Departamento de Estado que llega recién en 2020 posibilitando que el Ministerio de Defensa de Israel firme el acuerdo de adquisición en 2021.
Israel señala que el KC-46 es una aeronave cisterna con capacidades polivalentes, ya que puede utilizarse también para transporte militar. Cuando se incorporen a la IAF, reemplazarán a los antiguos Lockheed KC-130 y B707 convertidos a tanqueros.
En sus negociaciones con los Estados Unidos, el gobierno israelí busca conseguir slots de producción anticipados para lo cual pide a la USAF que retrase algunos de sus pedidos para colocar sus aeronaves. La petición es rechazada por las autoridades estadounidenses, pero no se descarta que puedan ceder dependiendo de las necesidades o grados de amenaza. Se estima que los cuatro KC-46 serán entregados en 2025.
KC-46
El KC-46 “Pegasus” forma parte del proyecto para desarrollar un nuevo avión de reabastecimiento de combustible en vuelo para la USAF. Principalmente, está dirigido para reemplazar los antiguos tanqueros KC-135E “Stratotanker”.
Sus orígenes se remontan a 2006 cuando la USAF presenta las bases de un proyecto conocido como KC-X. Cinco años después, en 2011, la institución adjudica a Boeing el desarrollo del programa bajo la denominación actual con base en una modificación a tanquero del B767-200SF.
Fotografía portada - Boeing