Para 2024, las aerolíneas proyectan ganancias por apenas US$6,14 por pasajero. El número contrasta fuertemente con las millonarias cifras con las que se suele asociar al sector.
Reunidas en la Asamblea General de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) en Dubái, el sector proyecta un escenario positivo para 2024 con beneficios netos por US$30.500 millones con un margen de 3,1%. El resultado es una mejora respecto a los beneficios de 2023 con un margen similar (3,0%) y también con la proyección de diciembre 2023 cuando se prevé US$25.700 millones para el presente año.
Según las proyecciones, el rendimiento de capital invertido en 2024 sea del 5,7%. Sin embargo, estarán 3,4 puntos por debajo del costo promedio del capital. Asimismo, se espera que las ganancias operativas suban de los US$52,2 mil millones a US$59,9 mil millones. No obstante, los gastos también aumentarán en un 9,4% con US$930.000 millones.
El transporte aéreo definitivamente vuelve a su funcionamiento normal tras la crisis de 2020. Los viajes ya se han reactivado en todas las partes del mundo, pese a retrasos de algunos países. Para 2024, viajarán 4.960 millones con un movimiento que califica como récord. Paralelamente, se espera que los volúmenes totales de carga lleguen a los US$62 millones.
“La industria aérea está en el camino hacia ganancias sostenibles, pero aún queda un gran vacío por cubrir”, dice Willie Walsh, director de IATA.
Las ganancias son cifras asombrosas, pero comparativamente reflejan una escasa rentabilidad considerando los gastos que tiene la industria aérea. Por lo mismo, en el sector insisten que es fundamental continuar reduciendo los costos. La comparación de las ganancias de las aerolíneas se la compara con ir a comprar un café en cualquier local.
El objetivo de esto es doble. Por un lado, mejorar las ganancias de las empresas. En paralelo, permite realizar inversiones y ofrecer mejores productos a clientes más demandantes.
“La rentabilidad permite invertir en productos para satisfacer las necesidades de nuestros clientes”, indica Willie Walsh, director general de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA).
Para mejorar las ganancias de las aerolíneas, IATA plantea resolver los problemas de la cadena de suministro. Se trata de un tema inmediato y clave ya que los operadores aéreos pueden avanzar en la renovación de flotas con aviones más eficientes y menos contaminantes, además de atender las múltiples necesidades de viaje.
En Dubái, las líneas aéreas insisten en terminar con las regulaciones onerosas y propuestas fiscales que aumentan los impuestos. Durante el plenario de la Asamblea General, Walsh entrega un mensaje claro y directo: “más impuestos no son la solución”, incluso bajo el argumento medioambiental.
Otro énfasis está colocado en la necesidad de políticas públicas armonizadas a nivel global. Se trata de un tema que por años la industria aérea viene solicitando, pero que sólo obtiene resultados parciales.
Proyección para Latinoamérica
Los operadores en la región proyectan resultados mixtos para 2024. Algunas aerolíneas anticipan ganancias impulsadas por las ventas reportadas en el primer semestre. Sin embargo, otras todavía están bajo una fuerte presión lo que refleja la fragilidad del sector.
De acuerdo con IATA, los retrasos en el desempeño financiero se deben en gran medida a la agitación económica y social observada en algunas partes de la región. México y Centroamérica, especialmente, El Salvador, Guatemala y Honduras, son contribuyentes clave al crecimiento de las ganancias de la región.
Fotografía portada - Simón Blaise

