El aeropuerto de Viña del Mar se transformará en el primero de bajo costo de Chile tras un anuncio realizado por el Presidente Gabriel Boric. Con la presencia simbólica de un Airbus A321 de SKY, las autoridades anuncian la modernización de la infraestructura en el actual recinto administrado por la Armada de Chile.
La modernización del aeropuerto de Viña del Mar (conocido también como Torquemada) tiene una inversión estimada en CLP76 mil millones. Cuando concluya, se espera que se materialice el anhelo histórico de la zona de contar con su propio aeropuerto con vuelos comerciales.
El interés del gobierno es que el aeropuerto de Viña del Mar pueda recibir vuelos comerciales a partir de 2027. Para ello, habilitará una terminal de pasajeros con más de 4 mil metros cuadrados. Las proyecciones de las autoridades consideran un movimiento anual de 900 mil pasajeros por año.
“Hace 12 años que en Chile no se ponía en marcha la habilitación de un nuevo aeropuerto", dice la ministra de Obras Públicas, Jessica López. "Este aeropuerto es un proyecto que tiene historia y que hoy día estamos empezando a concretar".
La modernización considera obras en el área de movimiento, una nueva torre de control, subestación eléctrica y bodegas, ensanche de pistas, estacionamiento de aeronaves comerciales y de aviación general. De esta manera, se espera sortear algunas limitantes para la operación considerando la infraestructura y equipamiento actual.
Sin embargo, no se especifican inversiones adicionales necesarias como ayudas a la aproximación atendiendo las condiciones climáticas.
Proyecto anterior
En 2017, la Dirección de Aeropuerto del Ministerio de Obras Públicas (MOP), informa que tanto la pista como la plataforma del aeropuerto Viña del Mar están habilitados para recibir vuelos comerciales, pero con ciertas restricciones de peso. La información la entrega tomando en cuenta el surgimiento de las líneas aéreas de bajo costo (LCC, por sus siglas en inglés) en Chile.
La idea de que Viña del Mar funcione como aeropuerto para las LCC nace del concepto de operar en aeropuertos alternativa a los principales con una infraestructura sencilla. Sin embargo, por la falta de infraestructura y equipamiento adecuado, más el componente necesario de la demanda las compañías LCC no consideran al aeropuerto de Viña del Mar como una opción comercial.
En septiembre 2023, el alcalde de la comuna de Con-Con, Freddy Ramírez, busca reactivar el proyecto. En reunión con la ministra del MOP, Jessica López, expresa la factibilidad de mejorar la infraestructura y proponer una operación dual, es decir, para la Armada y vuelos comerciales.
Viña del Mar es un aeródromo de uso público pero administrado por la Armada de Chile. Su utilización para vuelos comerciales se debe acordar con la Institución, además de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC).
El aeropuerto de Viña del Mar cuenta con una pista de 1.750 metros de largo por 30 de ancho con una resistencia de pavimento (pcn) de 30 F/B/X/T. Si bien puede atender a una aeronave Airbus A320 o Boeing 737, estas deben operar con restricciones de peso.
Cronograma de obras
Según señala el MOP, las obras para el nuevo aeropuerto de Viña del Mar finalizarán en 2026. De esta manera, se espera que los vuelos comerciales comiencen en 2027, sujeto a condiciones de operación de cada compañía aérea.
La nueva terminal de pasajeros contará con 4.182 m2, con 195 estacionamientos para vehículos. En el área de movimiento, se dispondrán de dos posiciones para aeronaves comerciales del tipo comercial (A320 o B737). A estas se agregarán cuatro para uso de aeronaves de emergencias.
"Vamos a estar en condiciones de iniciar las obras de construcción, en primer lugar, del terminal de pasajeros en el próximo año, para posteriormente iniciar formalmente los vuelos comerciales", agrega la ministra López.
El proyecto considera tres fases. La primera de 2025 a 2026 que contempla la construcción de la terminal y una inversión de CLP31 mil millones. La segunda a efectuarse entre 2030 y 2031 con una normalización de pistas y plataforma por una inversión de más CLP15 mil millones. Para 2034, está contemplado el término de la obra con un alargue de pistas y oficinas operacionales. También se contempla una calle de rodaje paralela (calle A) con una inversión adicional de más CLP32 mil millones.
Fotografía portada - MOP