United registra seis incidentes aéreos en una semana

Una serie de incidentes aéreos afectan a United Airlines en la última semana. Si bien ninguno de los sucesos tiene consecuencias para los pasajeros o miembros de la tripulación y en algunos casos se tratan de acciones de preventivas. Sin embargo, llaman la atención la atención de las autoridades.

Los seis incidentes aéreos de United ocurren principalmente en los Estados Unidos.. Asimismo, también incluyen aeronaves más antiguas y otras de reciente de fabricación.

El primero de los incidentes de United ocurre el 04 de marzo. Un Boeing 737-900ER (registro N31412) que cubre el vuelo Houston (IAH) – Fort Myers con 167 personas a bordo sufre un desperfecto en un motor cuando cruza a los 12.000 pies. La tripulación aplica el procedimiento y detiene el motor izquierdo. Los reportes indican que se registran una serie de explosiones, pero que continúa en funcionamiento.

La aeronave aterriza en forma segura en Houston (IAH) sin que se reporten lesionados. El vuelo se demora 03:15 horas a la espera de un avión de reemplazo. Las investigaciones determinan que el motor había ingerido plásticos de burbujas en el aeropuerto de salida. La situación podría estar asociada a procedimientos en tierra, probablemente, de los servicios de handling.

El segundo de los incidentes aéreos de United afecta a un B737-8 (registro N47280) ocurre el 06 de marzo. La aeronave en ruta Nassau – Nueva York (EWR) sufre un atasco de los pedales del timón. El comandante de la aeronave logra mantener el control de la dirección en la fase de aterrizaje y logra rodar hasta la plataforma.

De acuerdo con la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB), el comandante del vuelo reporta que los pedales no se mueven ante la presión del pie y quedan atascados en la posición neutral. La declaración es corroborada por la revisión de los datos de vuelo que indican que los pedales vuelven a funcionar tras el aterrizaje. La aeronave es desviada al mantenimiento para la inspección correspondiente. Al día siguiente, la compañía realiza un vuelo de prueba para replicar la anomalía.

Caída de una rueda

El mismo 07 de marzo, un B777-200ER (registro N226UA) asignado al vuelo UA35 de San Francisco a Osaka (KIX) sufre el desprendimiento de una rueda al momento de levantar el tren de aterrizaje. La rueda corresponde a la rueda interior trasera del tren principal izquierdo.

Las imágenes de vídeo muestran la pérdida de una de las rueda del tren principal del B777-200ER a segundos del despegue. El neumático cae en un estacionamiento para empleados en el aeropuerto de San Francisco, donde se estrella contra un automóvil y rompió la ventana trasera. Tras el impacto, atraviesa una cerca y se detiene en un estacionamiento vecino.

El avión continúa su ascenso hasta los 32.000 pies (FL320) y vuela 170 millas náuticas. Posteriormente, la tripulación decide regresar a los Estados Unidos para desviarse a Los Ángeles. No se reportan incidentes tras el aterrizaje y la aeronave no sufre daños mayores.

En San Francisco, tres automóviles estacionados resultan dañados por la caída de la ruta. También un empleado de seguridad del aeropuerto sufre heridas por el incidente. La Administración Federal de Aviación (FAA) declara que el suceso está bajo investigación.

Día complejo

Durante la jornada del 08 de marzo, United sufre otros dos incidentes. El primer afecta a un B737-8 (registro N27290) que cubre el vuelo UA2477 entre Memphis y Houston (IAH) registra una salida de pista tras aterrizar.

De acuerdo con los reportes, la aeronave toca tierra y tras reducir velocidad para salir en la última calle de rodaje sufre el colapso de su tren de aterrizaje izquierdo quedando el avión con daño menor en un terreno blando fuera de la pista. Los pasajeros son desembarcados por escaleras en plena pista de aterrizaje (cerrada por el procedimiento) y son llevados a la terminal. Tanto la FAA como el NTSB están investigando el incidente.

El quinto de los incidentes aéreos de United ocurre con un Airbus A320 (registro (N485) del vuelo UA821 entre San Francisco y Ciudad de México. En crucero a 37.000 pies (FL370) la tripulación decide desviarse a Los Ángeles por falla de un sistema hidráulico.

En Los Ángeles, los pasajeros son embarcados en un nuevo vuelo y avión hacia su destino final. La aeronave llega a Ciudad de México cinco horas después del horario programado. United comunica que la emergencia afecta a uno de los tres sistemas hidráulicos del A320.

El último de una compleja semana

El 09 de marzo se produce otro suceso asociado a la “cadena de incidentes” de United. Otro A320 (registro N421UA) que opera el vuelo UA2137 entre Chicago (ORD) y Salt Lake City recibe una alerta de aceite. Ante la situación, la tripulación decide regresar al aeropuerto de salida 45 minutos después como medida preventiva.

La FAA informa que no se registran problemas mayores con el incidente. Sin embargo, adelanta que habrá una investigación al respecto.

Como en otros incidentes, United reemplaza a la aeronave lo que permite que los pasajeros lleguen a destino. Los viajeros llegan a Salt Lake City 5 horas después del itinerario original.

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