A partir del 01 de febrero, Avianca vuelve a programar sus Boeing 787-8 en una de las frecuencias que tiene en la ruta Bogotá – Santiago. La colocación de esta aeronave representa una recuperación importante de la capacidad que durante el segundo semestre 2023 es reducida a sólo Airbus A320neo.
Tradicionalmente, Avianca opera en Santiago con una combinación de aviones de fuselaje ancho y angosto. A mediados del año pasado, decide desprogramar los B787-8 en esa ruta como parte de los ajustes del nuevo modelo de negocios. En ese sentido, estas aeronaves quedan asignadas sólo a cuatro rutas americanas, además de los vuelos intercontinentales a Europa.
De acuerdo con la información de Avianca, los B787-8 en la ruta Bogotá – Santiago está asignado al vuelo AV097/AV098, tradicionalmente operado con equipos de fuselaje ancho. Las otras frecuencias de Avianca continuarán asignadas a equipos A320neo.
Avianca cuenta con tres frecuencias entre Bogotá y Santiago. En 2023, transporta 353.614 pasajeros según datos de la Junta Aeronáutica Civil (JAC). La línea aérea colombiana termina el año pasado con resultados positivos en el transporte de pasajeros con un 4,0% por sobre 2019 y 35,6% sobre 2022.
Implicancias para los pasajeros
Para los viajeros, la colocación del B787-8 por parte de Avianca en la ruta a Bogotá – Santiago es una buena noticia. En primer término, representa mayor disponibilidad de viaje en una ruta importante para el mercado aéreo de Chile por la oferta de conexiones que la línea aérea ofrece en Bogotá. Además, la presencia de la comunidad colombiana en Chile también favorece a un aumento de la demanda.
Los B787-8 cuenta con una capacidad para 250 pasajeros. La distribución de asientos son 28 en Clase Ejecutiva y 222 en Economy.
El retorno de esta aeronave permitirá a las personas volver acceder al servicio Clase Ejecutiva que por el cambio de aeronave se elimina en el segundo semestre de 2023. De acuerdo con las nuevas clases tarifarias, esta alternativa está disponible bajo la denominación “Talla XXL”.
Los pasajeros que viajen en Clase Ejecutiva tienen check-in preferencial en los mostradores en los aeropuertos. A su llegada, la entrega del equipaje es prioritaria y pueden despachar dos maletas de hasta 32 kilogramos en bodega, además disponen de mayores alternativas para equipaje de mano.
A bordo, los pasajeros pueden elegir comida caliente en desayuno, almuerzo y cena con dos opciones para elegir en la que se incluye plato fuerte, snack y postre, así como bebidas frías, calientes y licores. También pueden cuentan con embarque/desembarque prioritario, amenity kit, cobija y almohada en vuelos nocturnos.
Fuera del avión la Talla XXL ofrece a los viajeros la posibilidad de cambiar el itinerario y reembolso. También pueden acumular una mayor cantidad de millas.
Para los pasajeros que viajan en Economy Class, el servicio sigue siendo pago. Toda la oferta adicional al viaje se comercializa como parte del mayor uso de los ingresos por servicios complementarios (ancillary revenues) que hace la línea aérea.
Más capacidad de carga
La colocación del B787-8 por parte de Avianca en la ruta Bogotá – Santiago también incrementará la capacidad de carga. La línea aérea vuelve a disponer de carga en containers y pallets que antes sólo se reserva a los vuelos cargueros.
Actualmente, Avianca Cargo dispone de cinco vuelos semanales en la ruta Miami – Bogotá – Santiago con equipos A330-200F. Según datos de la JAC, transporta más de 20 mil toneladas en 2023 con un crecimiento de 5,0% por sobre 2019 y 103,2% por sobre 2022.
Fotografía portada – Simón Blaise