Después de la interrupción forzada de 2020, Cusco retoma su conectividad con la recuperación de vuelos internacionales. Recientemente, LATAM retoma los vuelos con Santiago y en las próximas semanas hará lo mismo Avianca con Bogotá.
Previo a la crisis de 2020, Cusco logra contar con estos importantes vuelos internacionales que brindan un mejor acceso al turista. Con la reanudación de las rutas, la ciudad peruana antigua capital del imperio Inca contará con conexiones a tres importantes centros de conexiones en Sudamérica: Lima, Bogotá y Santiago.
A diferencia del periodo anterior, la conectividad internacional de Cusco que brindan Avianca y LATAM se realiza con equipos de mayor capacidad. Si bien hasta 2020, predomina el Airbus A319 con un máximo de 144 pasajeros, los vuelos ahora se realizan en equipos A320/A320neo con capacidad estará en torno de los 180 asientos.
El aumento de capacidad se produce por las acciones de las líneas aéreas en términos de eficiencia operacional y por la actualización de las respectivas flotas. El A320 es ambas compañías el avión insignia de las rutas medias.
Reanudación de los vuelos con Santiago
Desde comienzos de octubre, LATAM retoma los vuelos con Santiago. Se trata de una ruta ya abierta el año pasado, pero suspendida durante el presente año. La reanudación beneficia a los viajeros de Chile, así como de Argentina y Uruguay, que a través de la capital chilena pueden acceder a esta nueva ruta.
El vuelo de LATAM a Santiago es realizado por la filial peruana como parte de las eficiencias operacionales. Las salidas de Cusco son a las 08:10 horas para aterrizar en Santiago a las 13:35 horas. De regreso, las salidas de la capital chilena son a las 15:50 horas para llegar a las 17:25 horas.
Los vuelos tienen una frecuencia de tres veces por semana saliendo los miércoles, viernes y domingo. LATAM estima que ofrecerá más de 3.300 asientos disponibles por mes. Los servicios aéreos son realizados con equipos A319 o A320 dependiendo de la demanda.
“Estamos muy contentos de volver a ofrecer esta emblemática ruta a todos nuestros pasajeros”, dice María Paz Villasante, Gerente de Estrategia Comercial, LATAM Airlines Group. “Cusco no es tan solo la capital histórica de Perú, sino que también la vía más directa para llegar a Machu Picchu, una de las 7 maravillas del mundo moderno”.
Oferta de Avianca
Avianca reinicia las operaciones en Cusco desde el 30 de octubre. La programación considera cuatro vuelos por semana atendidos con Airbus A320 con capacidad para 180 asientos. Semanalmente dispondrá 1.440 asientos en la ruta en ambos sentidos.
Las salidas desde Bogotá están fijadas a las 07:45 horas para aterrizar en Cusco a las 11:10 horas. De retorno, los vuelos salen a las 16:45 horas para regresar llegar a las 20:00 horas para último banco de conexiones en la capital colombiana.
Mientras su competidora LATAM se encarga de la conectividad internacional desde el sur vía Santiago y a través del hub de Lima, la línea aérea colombiana proporcionará un acceso sin escalas desde el Norte. Por la gestión de pasajeros que realiza Avianca, sus compañías asociadas y la distribución de pasajeros que hace el hub de Bogotá se espera un aporte importante de viajeros.
Cusco más conectado
Cusco está conectado por vía aérea con las operaciones de LATAM, SKY y JetSMART. La principal ruta es con Lima con más de una veintena de vuelos diarios. También tiene conectividad con Arequipa y Ayacucho con los tramos interregionales.
Ahora, se suman los enlaces a Santiago y próximamente a Bogotá. Por la operación de Avianca, los vuelos hacia la antigua capital incaica también incluyen una escala previa en La Paz.
Cusco es uno de los destinos más atractivos del Perú y de todo el mundo. Cada año millones de personas llegan hasta la antigua capital de los incas para recorrer las maravillas arquitectónicas, sus templos ancestrales, disfrutar de las festividades. Sin duda, Machu Picchu es la atracción principal. La ciudad también es punto de intercambio de otras rutas turísticas por la Sierra peruana o en combinación con Bolivia.
Fotografía portada - Diego Jara