Por el impulso de la actividad turística, la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) proyecta que Costa Rica duplicará la cantidad de pasajeros por avión al 2030. Los principales flujos están determinados por vuelos desde Norteamérica y Europa, aunque también aparece un creciente interés desde Sudamérica.
Actualmente, Costa Rica cuenta con aproximadamente cuatro millones de pasajeros anuales. El movimiento de viajeros aéreos se da a través del aeropuerto Juan Santamaría de San José, el principal del país, y también de Liberia, popular destino vacacional. En los próximos siete años, se considera que la cifra podría crecer hasta 10 o 12 millones de pasajeros anuales en su proyección más optimista.
La cantidad de pasajeros obliga a las autoridades a brindar las condiciones para atender el aumento del flujo. Como objetivo prioritario aparece el tema de infraestructura con la ampliación de los aeropuertos.
El 90% de los viajeros que visitan los destinos costarricenses llega por avión. Por lo tanto, es necesario asegurar una infraestructura acorde para seguir desarrollando el turismo y economía de Costa Rica. Hasta el momento, hay una buena valoración del trabajo público-privado realizado.
“El Gobierno de Costa Rica ha generado un entorno positivo para la aviación, manteniendo impuestos y tasas competitivos”, señala Peter Cerdá, vicepresidente de IATA para las Américas. Desde la organización aérea esperan que estas condiciones se mantengan.
Rápida recuperación
De acuerdo con el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), los viajes y el turismo en Costa Rica aportan el 10,8% del Producto Interno Bruto (PIB) del país. La cifra contribuye a generar el 11% de todos los puestos de trabajo. Al cierre del primer trimestre 2023, el sector aporta con 160.000 empleos directos.
IATA señala que en la primera mitad el país tiene una rápida tasa de recuperación. Sólo en junio 2023, los viajes crecen en un 15,5% respecto en comparación con 2022. La Asociación destaca el lanzamiento de nuevas rutas sin escalas entre las que están los vuelos desde Liberia a Austin, San Francisco y Zúrich. También menciona las nuevas rutas desde San José a Cartagena y Medellín (MDE).
Desde el aeropuerto Juan Santamaría de San José ven números azules. En el primer semestre 2023, se transportan 2.878.884 pasajeros cifra superior a los 2.338.040 del mismo periodo del año anterior. Actualmente, ya hay más pasajeros que en 2019 cuando se movilizan en ese periodo 2.734.258 viajeros. Todo indica que este año la cifra será muy superior dado que los resultados no consideran la temporada estival del hemisferio Norte.
“Estos excelentes resultados del primer semestre son el reflejo de la excelente gestión que ha hecho el país como un destino de múltiples experiencias, principalmente a través del Instituto Costarricense de Turismo, pero también de todas las instituciones del Estado que apoyan la gestión aeroportuaria”, dice Ricardo Hernández, director de AERIS, concesionaria del aeropuerto de San José.
De cara al futuro, Cerdá señala que es necesario que las autoridades costarricenses sigan colaborando estrechamente con la aviación. En caso contrario, el desarrollo del transporte aéreo y su impacto positivo en el desarrollo económico social del país podría quedar limitado.
“Esperamos poder seguir colaborando estrechamente para que más personas puedan acceder a este medio de transporte y que los costarricenses se puedan seguir beneficiando de la conexión social que permite el desarrollo del turismo, del comercio y de la competitividad que le genera al país”, agrega el vicepresidente de IATA.
Actualmente, los viajes per cápita de Costa Rica están en un promedio de 1,3 viajes por año. La cifra está por encima del promedio de la región de 0,45 viajes por año, por lo que es un positivo antecedente para proyectar el aumento de la demanda.
Aportes
Actualmente, Costa Rica no tiene una línea aérea nacional con una capacidad suficiente para realizar vuelos internacionales. Por lo tanto, los operadores extranjeros asociado a la actividad turística son los principales catalizadores de tráfico.
Los operadores con capacidad internacional más importantes son Avianca -que hereda la operación de la antigua LACSA- y Volaris con su filial local. Ambas han abierto nuevas rutas, incluyendo a Sudamérica, Avianca con Quito y Buenos Aires (EZE) y Volaris llegando hasta Lima, son unos ejemplos.
Por la capacidad de estímulo a la demanda, el segmento de líneas aéreas de bajo costo (LCC, por sus siglas en inglés) realizará un aporte importante. Este modelo de negocios también demuestra ser ampliamente funcional al tipo de pasajero turístico que visita Costa Rica.
Frederico Pereira, CEO adjunto de Avianca, dice el “segmento low cost es la única manera de sobrevivir”, según cuenta al diario La Nación. Menciona que pretende aumentar próximamente los vuelos a Costa Rica para atender la alta demanda de viajeros.
Costa Rica también se beneficia del nuevo perfil de viajeros que busca destinos exclusivos, exóticos y alejados de la muchedumbre. La biodiversidad del país constituye un polo de extracción. Para atender esa demanda, distintas líneas aéreas están abriendo más vuelos sin escalas y directos a San José y Liberia. Operadores locales, como SANSA, por mencionar alguno, contribuyen a llevar a los turistas a distintos puntos del país.
Norteamérica será la región que más aporte al crecimiento de los pasajeros en Costa Rica. También Europa y América Latina. En esta última región, destacan los vuelos de Volaris y LATAM a Lima, además de las operaciones de Avianca y la conectividad de Copa Airlines.
Según AERIS, los viajeros de la generación millenial (42%) y generación X (30%), tiene los principales incrementos respecto a 2019, con un 6% y 3% respectivamente. La llegada de pasajeros de Norteamérica es por motivos vacacionales (71%) que buscan turismo de playa, aventura y ecología. El comportamiento se repite en viajeros desde Europa y otras regiones.
Fotografía portada - Aeropuerto San José de Costa Rica