Los agentes de rampa forman parte de la multiplicidad de actores que hacen posible que el sistema aeronáutico trabaje. Desde los albores de la aviación su trabajo es esencial, importancia que no disminuye con el tiempo. Por el contrario, aumenta a medida que el transporte aéreo se vuelve más asequible y masivo.
La aviación no puede existir sin la actividad de los agentes de rampa. La operación de una aeronave depende de estas personas cuya multiplicidad de laborales no siempre son reconocidas.
En la industria aérea, todo el trabajo de los agentes de rampa y el equipamiento que utilizan se los denomina como handling. El vocablo significa “manejo” en idioma inglés y se refiere a toda labor que implica una atención en tierra de una aeronave para que esta opere de manera segura.
Multiplicidad de tareas
El servicio de handling está conformado por una multiplicidad de tareas. Como el engranaje de un reloj, todo el equipo debe funcionar en perfecta coordinación. El objetivo es que las aeronaves operen seguras en los aeropuertos y vuelvan al aire en el menor tiempo posible.
Entre las tareas que desempeñan los agentes de rampa están la carga y descarga de los equipajes y de las mercancías, la colocación de los equipos de asistencia de las aeronaves como la unidad generadora de potencia en tierra (GPU, por sus siglas en ingles), las escaleras para que embarcar/desembarcar los pasajeros, las cintas transportadoras, etc. También se puede considerar dentro de las labores de handling la carga de combustible, actividad que es supervisada por otro actor esencial como son los bomberos del aeropuerto.
En coordinación con la cabina de mando y la dependencia de control de tráfico aéreo (torre o control terrestre), son responsables del movimiento de la aeronave hasta que inicia su rodaje camino a la pista.
Un punto muy importante y que es invisibilizado es la seguridad. Cargar o descargar una aeronave no es una tarea simple de realizar. Cada maleta o mercancía debe ser ubicada en el compartimiento específico de acuerdo con su peso, independiente si va en pallets, containers o suelto (bulk) para que el balance de la aeronave sea el correcto. Un error u omisión puede derivar en un incidente, accidente ya sea en tierra como en vuelo, cuyas consecuencias pueden ser fatales. De ahí la importancia de trabajar de acuerdo con manuales y seguir los procedimientos establecidos los que se van actualizando periódicamente.
En un mundo en el que las nuevas amenazas están presentes, la seguridad física cobra también importancia. En ese ámbito, los agentes de rampa deben responder a imprevistos como la búsqueda rápida de un equipaje de un pasajero que a última no embarque o es evacuado del avión, por mencionar alguna.
Una labor que no para…
Aunque el trabajo del agente está directamente está asociado con el movimiento de la aeronave en tierra, las funciones van más allá del tiempo de permanencia en el aeropuerto. Para que todo ocurra como se espera, la preparación es clave.
Con una planificación informada anticipadamente, se programa el trabajo asociado a la atención de la aeronave. Esto se lo conoce como briefing donde se revisan todos los detalles asociados a la operación.
En tierra, todos los equipos y trabajadores están colocados en la posición correspondiente unos 20 a 15 minutos antes del arribo. Cualquier retraso implica que la aeronave no podrá salir a tiempo. En lo cotidiano, los pasajeros pueden apreciar este habitual movimiento mientras esperan su vuelo en la terminal.
La actividad no acaba con la salida del vuelo. Tras la partida de la aeronave viene todo el proceso de-briefing y la atención ante cualquier circunstancia. Si el avión regresa al aeropuerto habrá que atender la contingencia. En paralelo, todo debe estar listo para recibir el siguiente vuelo, y el subsiguiente. Cada uno atendido con la misma seguridad, procedimientos, atención y minuciosa logística que se necesita.
La presión por la eficiencia
Con el cambio de los modelos de negocios en la industria aérea, la eficiencia toma protagonismo. En función de reducir costos y generar economías a escala, se colocan más vuelos. Esto, implica un aumento en la carga de trabajo en todo ámbito.
En los servicios de handling se siente. No sólo la cantidad de vuelos aumenta durante las 24 horas, sino que también se reducen los turn around, entendido como tiempo de permanencia de una aeronave desde que llega a un aeropuerto y sale. Esto, obliga a realizar todo el trabajo descrito en el menor tiempo posible sin que la seguridad ni ningún procedimiento esté descuidado. Por lo tanto, hay un incremento en la presión para todo el equipo.
En Chile, el turn around está entre 30 a 40 minutos promedio. Las empresas buscan disminuirlo a fin de conseguir la ansiada eficiencia operacional, economías de escalas y la reducción de costos. Se trata de una tendencia mundial que no se detiene, especialmente, desde que la “operación a bajo costo” está presente.
En el ambiente rampa se habla de un deterioro de las condiciones labores. Una de las críticas guarda relación con el aumento de la carga laboral y la mayor presión que no crecen con el aumento de los salarios o los beneficios. Por lo mismo, los conflictos de esta índole también se suman tanto en Chile como en el mundo.
La solución es compleja y probablemente no llegue en lo inmediato. Mientras la industria aérea busca disminuir lo más posibles los costos, la “cuestión laboral” continúa creciendo. Hoy, es uno los temas trascendentes que impacta a una aviación en constante cambio.
Fotografía portada - Simón Blaise O.