Aprovechando el contexto post crisis 2020, SKY profundiza su modelo de bajo costo (LCC, por sus siglas en inglés). La salida de trabajadores y su reemplazo por servicios tercerizados da cuenta la estructura sencilla con la cual quiere funcionar.
Si bien el contexto desafiante que enfrenta la industria puede imponen condicionen para reducir costos. Todo parece indicar que la apuesta está en dar valor a la compañía y hacerla más funcional hacia los planes futuros en un escenario donde la consolidación estará presente.
A fines de marzo, SKY anuncia la reducción de su planta laboral con la salida de los trabajadores en los aeropuertos de Chile. Recientemente, se confirma la reducción de la planta en Argentina al mínimo. Si bien esta no es significativa en términos de ahorro de costos, si da señales importantes.
SKY está simplificando su estructura interna para concentrarla. Si bien la gestión en Chile, la división en el Perú toma fuerza. Fuentes internas en la compañía indican que la filial peruana tiene un mayor protagonismo, lo que está en línea con los planes de expansión a nivel sudamericano.
Desde junio toda el “back office” como se lo denomina de Argentina pasa a nivel central. Será similar a la forma de funcionar en otros países donde operan como Brasil, Colombia, los Estados Unidos, México y República Dominicana. Casi todos están atendidos desde el Perú.
Estructura simple
En la interna, la desvinculación de trabajadores y su reemplazo por servicios tercerizados parece ser un golpe emocional. Desde abril, se percibe una cierta molestia por la decisión lo que se puede confirmar en publicaciones en redes sociales, declaraciones en algunos medios de prensa que incluyen anuncios de huelga.
Las acciones a nivel interno de la compañía parecen también confirmar lo anteriormente expuesto. En los últimos meses, parece existir una mayor necesidad de mostrar el buen ambiente interno. Incluso, aparece un “curioso” intento de documental que busca “exaltar” al trabajador de rampa de SKY.
La simplificación de la gestión es un objetivo de cualquier empresa para maximizar el uso de los recursos. En el modelo LCC es más que necesario, especialmente, cuando hay escenarios adversos. Desde su transformación como empresa hace 10 años, contar con el mínimo de empleados por avión es un objetivo a perseguir.
Los cambios buscan otorgar una mayor flexibilidad a la compañía ante las condiciones más desafiantes del sector. En los últimos años, los costos laborales aumentan y es uno de los factores coyunturales que están presentes.
Apuesta por Perú
No es novedad que SKY tiene sus fichas puestas en el Perú. El país concentra los anuncios de nuevas y potenciales rutas, incluso superiores a Chile. La razón está en la posición geográfica de Lima y el tamaño/potencial del mercado peruano.
Lima es mucho más funcional para crear la red sudamericana que busca SKY. Por las condiciones demográficas, políticas y económicas, no todos los mercados de la región son funcionales para una LCC. De ahí que se necesite un proyecto a nivel continental. El caso de JetSMART y de la propia SKY es una muestra.
Con una población superior a Chile, mayores flujos turísticos y gente que todavía no usa el avión como medio de transporte, el mercado peruano tiene un potencial enorme de desarrollo. Actualmente, la LCC chilena está fuertemente asentada en ese país donde es el segundo operador del mercado. Esto, le entrega una base sólida de crecimiento. En años anteriores, el Perú es una especie de “salvavidas” de la operación considerando las restricciones en Chile.
Sin considerar la interrupción forzada establecida por los Gobiernos a partir de marzo 2020, la mayoría de las nuevas operaciones más interesantes están en el Perú. Desde Lima se atienden las rutas a Buenos Aires (EZE), Cancún, Miami, Punta Cana y Sao Paulo (GRU) faltando cubrir otras ciudades como Ciudad de México, Ciudad de Panamá, Guayaquil, Quito, La Paz, Santa Cruz, Río de Janeiro (GIG) y Montevideo.
En cuanto a flota, casi la mitad está colocada en Lima. No se descarta que con la proyección para los próximos años pueda superar a la cantidad de aviones basados en Santiago.
Crear condiciones para una consolidación
Todo indica que la simplificación de la estructura interna como el posicionamiento estratégico en el Perú, busca dejar lista a SKY para el futuro. La empresa chilena tendría una imagen atractiva para ser adquirida por un tercero o integrar algún conglomerado aeronáutico. Su estructura sencilla y flexible la harían muy funcional.
Tras la puesta de bonos convertibles que son adquiridos por las firmas que inyectan recursos en Avianca para que esta salga del Capítulo 11, SKY es ampliamente funcional para los planes futuros del Grupo Abra que también incluye a GOL.
En un escenario futuro, el eventual interés de Avianca en SKY le permitiría recuperar la posición perdida durante los últimos meses en el Perú, tras abandonar la operación doméstica y el cierre del hub en Lima. También podría crecer en Chile, aunque su potencial es menos atractivo que una operación peruana.
SKY opera rutas domésticas a todo el Perú y posee rutas internacionales autorizadas desde los Estados Unidos (Florida), por el norte, hasta Argentina, por el sur. Para la compañía colombiana es ampliamente funcional.
Un efecto similar ocurriría también para SKY. Al ser parte de Avianca o estar en un conglomerado, la firma chilena no necesitaría crecer hacia destinos más desafiantes a la fecha como los Estados Unidos, México o el Caribe donde la competencia es intensa.
Fotografía portada – Ricardo J. Delpiano