Como parte del ejercicio multinacional conjunto "Resolute Sentinel 2023" que se desarrollará en Perú durante los próximos meses, la Fuerza Aérea de Estados Unidos (USAF, por sus siglas en inglés) desplegará un contingente militar donde destaca el despliegue de cuatro aviones de ataque A-10C Thunderbolt II.
Los ejercicios forman parte de una serie de intercambios militares que se planifican para el Perú durante el presente año, hecho que no ha estado exento de polémica dada la álgida actualidad política del país sudamericano.
"Resolute Sentinel 2023" contará con la presencia de más de mil efectivos de Perú, Estados Unidos, Colombia, Chile, Brasil, Ecuador, Uruguay, Panamá y Reino Unido. Se desarrollará en las localidades de Lima, Callao, Pucusana, Talara y Piura, teniendo la base aérea Las Palmas como centro de operaciones y planificación.
Por parte de Estados Unidos serán cerca de 160 efectivos que participarán con su respectivo armamento. Además, el despliegue de USAF incluye cuatro A-10C Thunderbolt II para entrenamiento de ataque y apoyo aéreo cercano, dos Boeing KC-135 Stratotanker que estarán encargados del reabastecimiento en vuelo de las aeronaves involucradas, dos Boeing C-17 Globemaster III y un Lockheed-Martin C-130H Hércules en tareas de transporte estratégico. A lo anterior, se sumarán C-146 Wolfhound, MC-12W Liberty y dos helicópteros Sikorsky MH-60.
La participación de los cuatro A-10C Thunderbolt II es un hecho inédito en ejercicios de estas características, ya que sus despliegues a Sudamérica son algo muy inusual. Además, se encuentran pronto a ser dado de baja por la USAF. Los aparatos operarán a la par con aviones de origen ruso Sukhoi Su-25 de la Fuerza Aérea de Perú.
Presencia de militares de Estados Unidos en Perú
Luego del fallido golpe de estado por parte del ex Presidente Pedro Castillo en diciembre, la situación social en el Perú se complica generando inestabilidad en el país. Dina Boluarte asume como la nueva Presidente bajo manifestaciones a lo largo de todo el país.
Desde entonces, las muestras de apoyo al actual gobierno peruano por parte de los Estados Unidos y sus aliados se dan a través de distintas señales. La más evidente es la participación de militares estadounidenses en ejercicios dentro del país sudamericano, lo que es considerado como una intervención militar extranjera por parte de sectores de izquierda de la política peruana.
Las relaciones actuales entre Perú y Estados Unidos pasan por un momento de reencantamiento luego de que por décadas Perú fuese un aliado fundamental de Rusia en la región. Lo anterior coincide con declaraciones de Laura Richardson, jefa del Comando Sur de Estados Unidos, sobre el interés del país norteamericano en recursos cuyos yacimientos son ricos en los países del cono sur entre los que está Perú.
¿Fin de la era rusa en las Fuerzas Armadas de Perú?
Perú es junto a Venezuela los países que más experiencia tienen en la operación de armamento de origen ruso en Sudamérica. Perú es líder en la operación de este material desde décadas antes que otro país de la región.
Hoy en día, en el contexto del conflicto armado entre Rusia y Ucrania, los equipos de guerra de fabricación rusa (principalmente medios aéreos) son muy apetecidos por la alianza occidental que busca proveer de este material a las Fuerzas Armadas de Ucrania para hacer frente a la amenaza rusa.
Es así como en enero del presente año, Laura Richardson envía un claro mensaje a los países sudamericanos que operan material ruso, afirmando que cada elemento donado a Ucrania será reemplazado por equipos de origen estadounidense sin costo alguno.
Actualmente en el inventario de las Fuerzas Armadas de Perú quedan en operación algunos aviones de combate Mig-29 "Fulcrum" y Sukhoi Su-25 "Frogfoot"; helicópteros de transporte Mi-8, Mi-17 "Hip" y de ataque Mi25 y Mi-35 "Hind"; y aviones de transporte Antonov An-32 "Cline". Sólo si se consideran medios aéreos. Todo lo mencionado anteriormente, es similar al material operado actualmente por las Fuerzas Armadas ucranianas
Las evidencias demuestran el gran interés por parte de los Estados Unidos en Perú, en aspectos políticos, de generación de recursos y abastecimiento de armamento. Es así, como la presencia inusual de aviones A-10C Thunderbolt II en el país latinoamericano, hacen creer a más de alguno que podría tratarse de una forma de incentivar a Perú a cambiar su material ruso por material occidental más moderno.
Además del Perú, otros países de Sudamérica que poseen material de vuelo ruso son: Argentina, con Mi-17 dados de baja tiempo atrás; Brasil, con Mi-35 dados de baja habiendo sumado pocas horas de vuelo; Colombia, con una de las mayores flotas de helicópteros Mi-8 / Mi-17 de la región; y Ecuador con algunos Mi-17 operados por el Ejército. Por otro lado está Venezuela, que por temas políticos no es considerado por occidente para abastecer de armas a Ucrania.
Las relaciones entre Perú y Ucrania no son nuevas. El Perú es el primer comprador del truncado proyecto de avión de transporte ucraniano Antonov AN-178, el cual es cancelado luego del desencadenamiento de los hostilidades con Rusia.
Si Perú opta por donar aviones a Ucrania, o sencillamente dar de baja su actual flota de elementos aéreos de origen ruso, es muy poco probable que vuelva a adquirir aeronaves proveniente de esta país, puesto que incluso Rusia está priorizando la fabricación de armamento y material aéreo para enfrentar su propio conflicto.
De esta forma se daría cierre a un ciclo de importante material aéreo ruso en las FFAA de Perú, que incluyeron modelos históricos como aviones de combate Su-22 "Fitter"; helicópteros Mi-2 "Hoplite", Mi-6A "Hook" y Mi-26 "Halo"; aviones de transporte An-26 "Curl", An-28 "Cash" y An-72 "Coaler"; y aviones de entrenamiento Ilyushin II-103
Fotografía de Portada - USAF