Con un transporte aéreo prácticamente recuperado en términos de demanda después de la crisis de 2020, Turquía ve con optimismo el futuro de su industria de turismo y viajes. Un país que prácticamente no necesita promoción alguna se inserta en el objetivo de vacaciones de las personas por su historia viva, las bellezas naturales y urbanas, en cuyas calles el pasado, presente y futuro se funden en una sola imagen. Para el presente año, tiene la ambiciosa meta de alcanzar los 60 millones de visitantes sólo por turismo.
El objetivo forma parte de la política pública del país que busca posicionar a Turquía o Türkiye como referente mundial. El presente año es especial ya que se cumplen los 100 años de la República.
La industria de la aviación y el turismo son buenos ejemplos de cómo el país avanza, pese a los desafíos naturales y mundo moderno que se imponen. Sus líneas aéreas como Turkish Airlines, AnadoluJet, Pegasus Airlines o Sun Express, entre un centenar de líneas aéreas se encargan de traer a los visitantes desde distintas partes del mundo.
En la Asamblea General de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) que recientemente se celebra en Estambul, su director general, Willie Walsh, resalta el crecimiento de Turquía y cómo la aviación es un pilar fundamental para el desarrollo económico del país. En sus comentarios en el plenario como en las conferencias de prensa, resalta como es factible volar desde Estambul a prácticamente todo el mundo con vuelos sin escalas.
Turkish Airlines este año proyecta continuar su crecimiento global con más vuelos a África, Medio Oriente, América y Asia. Para fines de este año, incorporará a Australia lo que significa que la línea aérea conectará los cinco continentes. Inicialmente, se hará con una escala vía Singapur, pero a futuro espera establecer vuelos sin escalas con un pedido que realizaría por más Airbus A350 o Boeing 777-8/-9.
Estrategia
El gobierno de Recep Tayyip Erdoğan está implementando una política pública para potenciar a Turquía como destino turístico y hacer del país uno de los más visitados en el mundo. Todo está en línea para conmemorar los 100 años de la República.
Para alcanzar las metas, Turquía está implementando una estrategia de comercializar y promover todos los segmentos de viajeros. Además, promueve distintos destinos dentro y fuera del país, ya sea de interés histórico, de congresos, político, playas, comercial, placer, salud, ecología, aventura o deportivos. La Asamblea General de IATA o la final de la Copa Europea de Fútbol en Estambul son ejemplos de algunas acciones que se están llevando a cabo.
Como parte de las medidas, Turquía está eliminando la burocracia para los viajeros en lo que respecta a visas y se colocan más facilidades para que las empresas turísticas puedan operar. En las ciudades principales, existen facilidades para que los visitantes puedan moverse por la ciudad con señalética adecuada y buena infraestructura.
En los aeropuertos, destacan las distintas renovaciones. No sólo en Estambul (IST/SAW) o Ankara, sino en terminales como Antalya, Bodrum, Dalman, Izmir, entre otras. Muchos reciben financiamiento apropiado para su mejoramiento integral.
Fuerte crecimiento
El último Informe de Impacto Económico del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC) pronostica que el Producto Interno Bruto (PIB) de Viajes y Turismo de Turquía crecerá a una tasa promedio de 5,5% por año hacia la próxima década. Las estimaciones consideran que sería más del doble de la tasa de crecimiento de 2,5% que tiene la economía general del país.
El WTTC asegura que para 2032, el sector turístico turco tendrá una contribución al PIB de alrededor US$117 mil millones. Se espera que represente un 11% de la economía local y que sólo este rubro cree más de 716.000 nuevos puestos de trabajo.
Fotografía portada - Ricardo J. Delpiano