Aprovechando el interés por una nueva carrera espacial, la empresa start-up Vast, hace público su interés para colocar una estación espacial en la órbita terrestre en 2025. La compañía ligada a Jeb McCalbeb, un multimillonario de criptomonedas tiene como objetivo dar a conocer su proyecto ante la necesidad de reemplazo de la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés).
La estación espacial de Vast tiene el tamaño de un autobús escolar. Se trata de una estructura cilíndrica denominada Haven-1. Su creación es resultado de los fondos de desarrollo que la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) entrega a distintas firmas con el propósito que desarrollen tecnología espacial, incluyendo el reemplazo de la ISS.
Vast no recibe de estos fondos, pero si los espera recibir de aquí al 2028. Por lo tanto, la presentación de su proyecto sugiere ser más bien un interés estrictamente comercial no sólo para su desarrollo, sino para beneficiarse de los subsidios públicos que los Estados Unidos entrega para las investigaciones espaciales.
De acuerdo con fuentes de prensa, McCaleb está respaldando el desarrollo de la estación espacial. Para ello, compromete alrededor de US$300 millones. Se espera que parte de estos fondos se complementen o se recuperen con los recursos que espera recibir en algún momento de parte de NASA.
Para enviar su propuesta de estación espacial, Vast está en conversaciones con SpaceX para el lanzamiento y transporte.
Hasta el momento, ninguna entidad privada ha conseguido financiar, construir y enviar una estación espacial. La ISS está financiada por varios países y está construida con varias secciones que son enviadas en distintos lanzamientos. Una estimación de su costo se calcula en US$100 mil millones.
De prosperar, Vast sería la primera empresa privada en tener una estación espacial. Sin embargo, todavía existen dudas sobre la viabilidad del proyecto y, probablemente, su propuesta responda más a un interés de conseguir recursos más que a un desarrollo en sí de la infraestructura.
Fotografía portada - Vast