Con la asistencia del Presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, su ministro de Defensa, José Mucio Monteiro Filho y el comandante de la Fuerza Aérea Brasileña, el general Marcelo Kanitz Damasceno de la Fuerza Aérea Brasilera (FAB), Saab inaugura la línea de producción del Gripen en Brasil. Ubicado en la planta de Embraer en Gavião Peixoto (Estado de São Paulo), se trata de un hito importante de transferencia de tecnología que tiene como objetivo explorar y trabajar conjuntamente en nuevas oportunidades de negocios.
La inauguración de esta línea de ensamblaje final del Gripen E también es histórica a nivel mundial. Se trata de la primera planta de Saab fuera de Suecia marcando un hito para el fabricante en un entorno competitivo importante.
“El inicio de operaciones de la línea de producción del Gripen demuestra nuestro compromiso de transferir tecnología y conocimiento a la industria brasileña. Aquí produciremos 15 de los 36 aviones actualmente contratados por la Fuerza Aérea Brasileña”, señala Micael Johansson, presidente y CEO de Saab.
La planta de Embraer en Gavião Peixoto con la red de Diseño y Desarrollo Gripen (GDDN), el Centro de Pruebas de Vuelo Gripen (GFTC), y ahora la línea de ensamblaje, alberga las etapas de desarrollo, producción y prueba de la aeronave.
“Celebramos no solo la inauguración de la línea de producción de cazas Gripen, sino también el éxito de la colaboración entre Saab y Embraer, que se fortalece cada día con el objetivo común de servir a nuestro cliente, la Fuerza Aérea Brasileña. Desde sus inicios, Embraer ha jugado un papel relevante en el programa Gripen, participando, por ejemplo, en el desarrollo de la versión brasileña del avión biplaza. Como evolución natural de esta relación, esperamos que pronto podamos expandir nuestro negocio juntos a nuevos mercados”, añade Bosco da Costa Junior, presidente y CEO de Embraer Defense & Security.
“El inicio de la producción del avión F-39 Gripen en Brasil simboliza la consecución de un ambicioso proyecto que se traduce en transferencia de tecnología, generación de empleo y el consecuente desarrollo del sector aeroespacial brasileño. Gracias a una sólida asociación entre la Fuerza Aérea, Saab y Embraer, ahora somos parte del selecto grupo de países que tienen la capacidad de construir aviones supersónicos. ¡Felicitaciones a todos los involucrados!” , celebra el comandante de la FAB, general Marcelo Kanitz Damasceno.
Aprovechar oportunidades en la región
Desde la firma del contrato para suministrar 36 cazas Gripen, distribuidos en 28 Gripen E (monoplaza) y 8 Gripen F (biplaza) a la FAB en 2014, Saab y Embraer trabajan juntos en el mayor proyecto de transferencia de tecnología en curso en Brasil. Recientemente, con la firma del Memorándum de Entendimiento entre las empresas, la línea de producción también se ha convertido en una oportunidad para nuevos negocios.
Saab aterriza en Brasil con el pedido que este país realiza para renovar los aviones cazas de la FAB. La apuesta también considera atender la producción de aeronaves en Colombia. Sin embargo, la decisión del gobierno de Gustavo Petro pone desafíos para el fabricante que tiene a Brasil como único cliente en la región.
Pese a este inconveniente, es posible que el fabricante sueco apueste por las necesidades de renovación de material aéreo que otros países latinoamericanos tienen en el corto y mediano plazo. La capacidad de producción en Brasil será una ventaja competitiva para ofrecer el Gripen a otros países cuando corresponda.
En dicha acción, no se descarta que Embraer pueda participar con sus productos para ofrecer a los distintos Gobiernos un paquete de aeronaves y soluciones tecnológicas de defensa.
“Queremos que Brasil se convierta en un centro de exportación para América Latina y potencialmente para otras regiones”, agrega Johansson.
Producción
La planta de Embraer en Gavião Peixoto alberga las etapas de desarrollo, producción y prueba de la aeronave. Recibe las estructuras del Gripen producidas en las plantas de Saab en Linköping (Suecia) y São Bernardo do Campo (Estado de São Paulo, Brasil).
Una vez que se completa un avión, se realizan pruebas funcionales y de vuelo para preparar la aeronave para la entrega final. La planta de Embraer producirá 15 cazas Gripen E para Brasil. Las unidades ensambladas en Brasil se entregarán a partir de 2025.
Con el fin de adquirir las habilidades necesarias para la producción de aviones de combate supersónicos en Brasil, los técnicos de Embraer realizan entrenamientos teóricos y prácticos en Saab en Linköping. La capacitación forma parte del trabajo conjunto e intercambio de información resultante de la alianza entre países y empresas.
Fotografía portada – Saab