Con el fin disponer de medidas para estimular el tráfico aéreo y enfrentar el aumento de los costos, la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA, por sus siglas en inglés), vuelve a hacer un llamado a las autoridades y al Congreso de Colombia para reintroducir a la brevedad la reducción del Impuesto de Valor Agregado (IVA) a los tiquetes aéreos y el combustible de aviación al 5%. La medida busca apoyar la reactivación, fortalecer la conectividad del país y asegurar los beneficios derivados de la aviación.
IATA señala que los usuarios comienzan a sentir el impacto del transporte aéreo. El costo de los pasajes sube con el incremento del IVA en 14%, además de otras tasas, contribuciones e impuestos. Esto, como consecuencia del término del beneficio de reducción del IVA al 5% aplicado por el gobierno del Presidente Iván Duque para impulsar la aviación a partir de mediados de 2020. Con el aumento de los precios, las reservas para están disminuyendo.
La reducción del IVA tiene un impacto positivo al aumentar la demanda. Como resultado, Colombia es el país que más rápido se recupera de la crisis provocada por los Gobiernos, ayudado por la eliminación oportunida de las inefectivas medias. La llegada de más pasajeros en rutas doméstica e internacional repercute en otros sectores económicos como la hotelería, los restaurantes, las agencias de viaje, gastronomía. También favorece el desarrollo de rutas, aumento de frecuencias y la llegada de nuevos operadores.
“Al incrementarse el IVA al 19%, el efecto que acarrea es contrario, perdiendo los beneficios adicionales que la industria aérea contribuye de manera significativa en el sector del turismo. Este incremento del IVA podría generar decrementos de 15,4% (4,9 millones) en la demanda doméstica y cerca 13% (1.9 millones) en la demanda internacional”, dice IATA.
El ministro Ocampo afirma que la reducción representaría una disminución en el recaudo de los ingresos del presupuesto general de la Nación de aproximadamente COP$1,2 mil millones que a la tasa de cambio de hoy sería cerca de US$265,4 millones. Sin embargo, esta alza de 14 puntos estaría evitando una contribución mayor del sector a la economía, además de poner en riesgo cerca de US$1.485 millones de contribución al Producto Interno Bruto (PIB).
IATA estima que están en riesgo 47 mil empleos. Dicha cantidad está calculada por el aporte indirecto de la aviación a otros sectores productivos relacionados.
Caída de las reservas
IATA explica que las reservas aéreas están a la baja. La Asociación compara los datos de diciembre de 2022 cuando existe aún la reducción del IVA y enero de 2023 con la normalización del cobro tributario.
“Al comparar las cifras de enero de 2023 con las de diciembre de 2022, vemos un decrecimiento del 26% en las reservas. Para comprobar la veracidad de dicho decrecimiento y de su relación con el incremento del IVA en los tiquetes aéreos, es importante tener cuenta que la variación de las reservas de enero de 2020 con respecto a las de diciembre de 2019, fue de apenas 1.6%, mientras que la variación entre enero de 2022 y diciembre de 2021 fue de 1.7%. Así las cosas, la variación que se dio este año, de 26%, es cerca de 13 veces mayor que la de los años anteriores”, explican.
Alta carga impositiva
Colombia existe alta una carga impositiva para su aviación. El cobro se realiza por tasas y contribuciones que se cobran en la venta de los pasajes. Como resultado, el precio final de los boletos aéreos es elevada.
IATA expone que el alza de impuestos se opone al propósito de lograr una mayor democratización de los cielos. Con más cobros, se crean barreras para asegurar la mayor accesibilidad de las personas (especialmente, de menos recursos) al viaje en avión. Si bien las líneas aéreas pueden disponer de tarifas bajas a medida que reducen sus costos y son más eficientes, los impuestos hacen todo lo contrario.
La reducción que se propone busca ayudar a cerrar la brecha entre los precios con impuestos y los precios de mercado. También se busca incentivar la demanda y acceso a los servicios aéreos y cumplir la meta de pasajeros y turismo establecida por el Gobierno Nacional.
Como ejemplo a seguir, menciona el caso de Ecuador. En ese país, el Gobierno reduce los impuestos de Potencia Turística y Eco Delta, al 5% del valor de la tarifa con un techo máximo para cada uno.
Fotografía portada - Avianca (referencial)