El inicio de un paro de actividades en protesta por la inseguridad en Calama complica parcialmente el acceso al aeródromo El Loa de la ciudad. El único camino que conecta la terminal aérea con la ciudad se ha visto afectado por cortes asociados al movimiento que lidera el propio alcalde Eliecer Chamorro.
Ante la situación, la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) informa que ante una reprogramación o cancelación de los vuelos los pasajeros deben contactar con su respectiva compañía aérea. Hasta el momento, no hay vuelos afectados. La autoridad aeronáutica informa que el aeródromo continúa operativo.
Información del Consorcio Aeroportuario de Calama S.A. (CACSA), sociedad concesionaria que administra el aeródromo El Loa, confirma que no hay vuelos demorados tanto en la llegada como en la salida. Hasta las 10:00 horas, las operaciones aéreas continúan con su operación a itinerario. Sin embargo, no descarta que un incremento de las medidas de fuerzas como los cortes de tránsito puedan comprometer los vuelos durante la jornada.
El aeródromo de Calama es estratégico para Chile. Los vuelos son fundamentales para atender la demanda corporativa desde y hacia la ciudad, principalmente asociada a la actividad minera. Además, atiende el tráfico turístico de uno de los principales destinos del país como es San Pedro de Atacama y otras zonas del altiplano.
Según las estadísticas de la Junta Aeronáutica Civil (JAC), Calama es el principal destino dentro de Chile por el tráfico corporativo asociado a la actividad minera y el turismo. En marzo, el aeródromo El Loa reporta un movimiento de 180.712 pasajeros.
Las líneas aéreas que operan en Calama son LATAM, JetSMART y SKY que conectan la ciudad con Santiago, La Serena y Concepción. Ocasionalmente, también se registran vuelos chárter de Aerovías DAP como de otros operadores, además de algunos vuelos internacionales no regulares.
El conflicto
El paro de actividades responde a una respuesta política ante la falta de seguridad en la ciudad. Se trata de un problema que se viene arrastrando por años, pero que en el último tiempo se incrementa significativamente ante la presencia del crimen organizado ligado al factor de la migración ilegal.
El factor detonante que genera el paro es el ataque armado a una comisaría de la ciudad. Pese a las gestiones, el gobierno no logra destrabar la movilización. Como resultado, Calama amanece sin locomoción colectiva, escuelas y comercio, además de cortes de caminos.
Fotografía portada – Ricardo J. Delpiano