Como un paso importante hacia el vuelo autónomo, Airbus consigue guiar y controlar de manera autónoma en vuelo de un dron utilizando un A310 MRTT. Como parte de la operación, se consigue un reabastecimiento aire-aire de manera totalmente autónomo.
Para Airbus, los éxitos de estos ensayos demuestran un avance significativo para las futuras operaciones aéreas, tanto en aeronaves tripuladas como no tripuladas. Según el fabricante, este tipo de soluciones pueden contribuir a reducir la fatiga de las tripulaciones y el error humano. Además, postulan que se podrían minimizar costos de capacitación del personal y proporcionar operaciones más efectivas en distintos escenarios.
“El éxito de esta primera campaña de pruebas de vuelo allana el camino para el desarrollo de tecnologías de reabastecimiento de combustible aire-aire autónomas y no tripuladas”, expresa Jean Brice Dumont, jefe de Sistemas Aéreos Militares de Airbus Defence and Space. “Aunque estamos en una etapa temprana, hemos logrado esto en solo un año y estamos en el camino correcto para la formación de equipos tripulados y no tripulados y futuras operaciones de la fuerza aérea donde los cazas y aeronaves de misión volarán junto con enjambres de drones”.
El ensayo se realiza el 21 de marzo. Ese día, un A310 MRTT despega desde Getafe, España, junto con varios drones DT-25. La aeronave de reabastecimiento de combustible actúa como receptor volando hasta el centro de pruebas de Arenosillo en Huelva. Sobre el golfo de Cádiz, el control del dron pasa de una estación terrestre al avión para guiarlo de manera autónoma a la posición de reabastecimiento en vuelo.
La prueba de Airbus dura alrededor de seis horas. En ese periodo, cuatro drones lanzados sucesivamente son controlados secuencialmente por medio de la inteligencia artificial y algoritmos de control cooperativo hasta una distancia mínima de 150 pies o 45 metros del A310 MRTT. En todo este proceso destaca la ausencia de interacción humana.
Tecnología de tres pilares
Airbus basa esta nueva tecnología en tres pilares fundamentales que marcarán las futuras operaciones aéreas militares. El fabricante concibe un escenario de misión compartido en entre distintos tipos de aeronaves, pero asume una transición al vuelo autónomo sin establecer posibles fechas para ello. La razón responde a la falta de certezas de cuándo la tecnología permitirá brindar operaciones aéreas seguras.
Para el fabricante europeo, tres pilares marcan el futuro de los vuelos autónomos con aeronaves tanqueras:
- Navegación precisa para determina la posición relativa, la velocidad y las actitudes de las dos aeronaves.
- Comunicación intra-vuelo entre plataformas para permitir el intercambio de información.
- Algoritmos de control cooperativo para proporcionar funcionalidades de orientación, coordinación, consenso y prevención de colisiones.
Según Airbus estas tecnologías pioneras son desarrolladas por equipos de Alemania, España y Francia. Se esperan que sean reutilizadas a futuros en otros proyectos clave como el Futuro Sistema de Combate Aéreo (FCAS) que busca desarrollar la Unión Europea.
Se espera una segunda campaña para fines 2023. En esta, se explorará el uso de sensores de navegación basados en inteligencia artificial y algoritmos mejorados para vuelos autónomos en formación. Además, también habrá dos drones simulados volando en las cercanías del A310 MRTT para demostrar operaciones autónomas con múltiples receptores y algoritmos para evitar colisiones.
Fotografía portada - Airbus