Estrechando relaciones estratégicas que permitirán a Japón avanzar con sus programas de defensa y al Reino Unido contar con un papel mayor de seguridad en Asia, ambos países anunciarán un acuerdo para construir un nuevo avión caza de última generación. En el proyecto también participará Italia.
El proyecto está asociado con el programa para producir una aeronave caza F-X por parte de Japón, el cual está liderado por el Reino Unido. Se trata de la primera ocasión que el país asiático colaboré con otros países más allá de los Estados Unidos en el ámbito de la defensa. Por lo tanto, el programa conjunto a anunciar representa un interesante punto de inflexión en los últimos 70 años.
El anuncio del futuro caza se espera que ocurra antes de que Japón oficialice una nueva estrategia de seguridad nacional. El plan japonés considera una serie de compras militares que podrían producirse hacia el término del mes, después del anuncio del Gobierno.
Actualmente, el gobierno japonés está analizando una flexibilización de sus reglas para la exportación de tecnología militar. El cambio en su normativa es fundamental para poder desarrollar la futura aeronave F-X que pretenden desarrollar.
El proyecto de un nuevo avión de combate estará encabezado por BAE Systems desde el Reino Unido, y Mitsubishi Heavy Industries por parte de Japón. Por parte de Italia, la participación estará a cargo de Leonardo. En 2023, se concretarían mayores detalles de la aeronave, incluyendo los plazos de producción, distribución del trabajo y las distintas variantes a desarrollar.
Objetivo China
El interés geopolítico del Reino Unido es tener un papel más preponderante en materias de defensa en Asia. La intención es no perder la influencia y oportunidades, especialmente, con la entrada de nuevos países al mercado de defensa para los próximos años. Para Japón, la alianza con Europa está orientada a contar con futuros socios estratégicos que acompañen sus planes de defensa.
Sin embargo, tanto Japón como el Reino Unido comparten un objetivo común: China. De acuerdo con distintas versiones en prensa, lo que se busca es contrarrestar el poder militar del gigante asiático, punto que para los Estados Unidos también es conveniente.
Con la nueva estrategia de defensa a anunciar por parte de Japón, se espera aumentar el presupuesto a alrededor el 5% del Producto Interno Bruto (PIB) en los próximos cinco años. De esta manera, se espera financiar la compra de nuevos aviones y armadas, incluyendo misiles, con el propósito de disuadir a China de recurrir a acciones militares en el mar de China Oriental.
Ilustración de portada – Aero-Naves