Como parte de un esquema normal de relaciones entre países amigos, califica Irán el suministro de vehículos no tripulados operados a distancia (RPAS, por sus siglas en inglés, o drones, como se los conoce popularmente) a Rusia. En los pasados días, la República Islámica reconoce que suministra drones a Moscú, sin embargo, esto ocurre en un periodo previo a la invasión a Ucrania según declaran.
El Presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, acusa a Irán de mentir. En sus comunicaciones habituales, señala que sus Fuerzas Armadas derriban habitualmente al menos 10 de los drones que atacan todos los días.
El ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Hossein Amirabdollahiam, dice que unos meses antes del inicio de la guerra, su país envía una “pequeña cantidad de drones” a Rusia. Sin embargo, no precisa la cantidad exacta de equipos. En respuesta a las acusaciones de Ucrania, asegura que desde el inicio del conflicto no se han suministrado más drones.
En octubre, la Unión Europea acuerda nuevas sanciones contra Irán por las entregas de aeronaves no tripuladas, mientras que el Reino Unido establece medidas similares a tres militares iraníes y un fabricante de defensa.
Para Amirabdollahiam, la acusación de Ucrania forma parte de una propaganda de algunos países occidentales contra Irán. Al respecto, señala que hay un alboroto innecesario, especialmente cuando se menciona que además de los RPAS también se suministran misiles.
“Este alboroto hecho por algunos países occidentales de que Irán ha proporcionado misiles y aviones no tripulados a Rusia para ayudar en la guerra en Ucrania, la parte de los misiles está completamente equivocada”, cita por la agencia oficial de noticias Irán. “La parte de los drones es cierta y le proporcionamos a Rusia una pequeña cantidad de drones meses antes de la guerra de Ucrania”.
Sin embargo, Ucrania insiste que hay un aumento de ataques con drones, especialmente, contra la infraestructura civil como centrales eléctricas y represas. Menciona que los RPAS utilizados son los Shahed-136 de fabricación iraní. Como ejemplo, Zelensky dice que el viernes derribaron 11 drones iraníes.
Las acusaciones del Presidente de Ucrania parecieran enmarcarse más en una presión para que sus aliados proporciones más defensas contra el ataque ruso que en una denuncia concreta. Incluso, el enviado especial de los Estados Unidos a Irán señala que no es cierto lo del envío de drones a Rusia.
Los RPAS tienen un fuerte protagonismo en la guerra en Ucrania como símbolo de los conflictos armados contemporáneos. Como herramienta defensiva, el gobierno de Zelensky espera lanzar una campaña de recaudación de fondos para comprar nuevos drones. Asimismo, espera próximamente “buenas noticias” respecto a sus aliados en el envío de armamento, aviones, defensas antiaéreas y pertrechos, pero sin dar detalles.
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