En la apertura del plenario del Foro de Líderes de la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA), Adrián Neuhauser, CEO de Avianca y nuevo presidente del Comité Ejecutivo de la asociación, destaca la fuerte recuperación que tiene el sector después de dos años de severas restricciones que prácticamente paralizan el transporte aéreo y sin tener ayudas de los Gobiernos. Sin embargo, plantea que hay desafíos inmediatos que atender más allá de terminar la recuperación.
“Recuperar el 100% de los asientos no es suficiente. Latinoamérica sigue siendo una región donde es difícil y caro viajar. Es una región pobre donde mucha gente no tiene presupuesto”, expresa Neuhauser.
Pese a los cambios en los nuevos modelos de negocios de las líneas aéreas y a la rápida recuperación, liderada por los países que levantan tempranamente las restricciones, el nuevo presidente del Comité Ejecutivo de ALTA señala que la región todavía está lejos de movilizar la cantidad de pasajeros que los países desarrollados. Mientras en Europa y los Estados Unidos la tasa per cápita de viajes en avión es de 2,0, en Latinoamérica es de 0,6.
De cara al futuro inmediato, en ALTA se plantea el desafío de cómo hacer que la aviación sea más asequible para una población que está afectada por problemas económicos. Entre los temas que más preocupan están el costo que genera la inflación, la devaluación de las monedas locales, además de problemas pendientes de solución como es la infraestructura, los marcos legales y la carga tributaria. Los dos últimos puntos llaman la atención de la industria.
El primer es la excesiva judicialización de las disputas con pasajeros en Brasil que están totalmente descolocada respecto a cualquier otro mercado en el mundo. Un juicio por cada 227 pasajeros en Brasil comparado con un juicio por cada tres millones en los Estados Unidos o un juicio por cada ocho vuelos en Brasil versus un juicio por cada 13.000 vuelos en los Estados Unidos.
En ese mismo sentido, se manifiesta la preocupación de la defensa de los intereses de la industria y de la seguridad de los propios pasajeros, especialmente con la creación de listas negras de viajeros disruptivos. El tema es de preocupación en Colombia con la fuerte alza de pasajeros conflictivos con un ambiente ausente de regulación.
Otro tema de preocupación inmediata son los impuestos. Tanto los actuales como otros nuevos que se propone representan una amenaza para la recuperación de la aviación y por lo tanto, ponen el peligro el desarrollo económico y social de los países.
“Hay retos de impuestos. Gran parte de lo que los clientes pagan por viajar no es recaudo sino que se van en impuesto”, sentencia ante una audiencia de más de 500 invitados de toda la región.
En ALTA, la industria aérea señala que los retos inmediatos no son menores. Por el contrario parecen aumentar con la tensión geopolítica internacional y la crisis económica. Todo en su conjunto está elevando los precios de los pasajes, aspecto que es difícil de explicar al usuario, especialmente cuando se quiere transmitir los beneficios del transporte aéreo y de los esfuerzos por facilitar los viajes.
En lo inmediato, el concierto internacional y los desafíos geopolíticos no auguran que el escenario de pasajes caros desaparezca. “Por el ambiente geopolítico que estamos viviendo es algo que no vemos retrocediendo en un futuro cercano”.
Finalmente, se hace referencia al tema inflacionario que golpea a las familias de cada país, especialmente en aquellas de menores recursos. Al igual que para la población, la inflación es un problema para la industria porque debilita el poder adquisitivo y termina elevando los costos.
“La inflación en toda la región es otro reto. Tenemos niveles de inflación que no se habían visto en décadas con situaciones políticas complicadas como Argentina, también Colombia y Chile con situaciones muy difíciles”, puntualiza Neuhauser.
Fotografía portada - Ricardo J. Delpiano