A lo largo de la historia, las líneas aéreas utilizan para el transporte de carga a sus aeronaves más antiguas y menos eficientes. Sin bien hay compañías que invierten en equipos nuevos de última generación, la tendencia en el mundo es en general ocupar aviones de segunda mano, principalmente a través de conversiones.
Para Airbus, esta realidad representa un desafío importante si la industria quiere alcanzar las metas de cero emisiones netas para 2050. La carga aérea es un sector importante de la aviación y con las perspectivas de aumento del comercio electrónico continuará desempeñando un rol estratégico. Por lo tanto, abordar el reemplazo de aeronaves más antiguas y menos eficientes es una prioridad.
En conversación con Air Cargo News, Crawford Hamilton, jefe de Marketing de Aeronaves Cargueras de Airbus, se refiere a esta problemática. Señala que toda la industria de la carga aérea tiene un desafío medioambiental inmediato.
“La ruta más rápida para la sostenibilidad en la industria de la carga aérea es reemplazar la generación actual de cargueros pesados (heavies)”, dice. Sus palabras hacen referencia, principalmente a los Boeing 747, así como para los antiguos A300-600F y A310-300F que todavía son utilizados para el transporte de carga.
Si bien no hay ninguna aeronave de nueva generación en el mercado, asegura que hay soluciones con el A350F y el Boeing 777-8F. Desde su perspectiva, se infiere que ambas aeronaves serán claves para abordar el desafío de sostenibilidad del sector de carga porque van a reemplazar a los cargueros de mayor capacidad.
En ese sentido, resalta que Airbus tomará ventaja ya que el A350F saldrá al mercado dos años antes que su competencia más directa. De acuerdo con los anuncios, esta aeronave tiene previsto salir al mercado en 2025.
Apelando a su posición en la empresa, resalta las ventajas del futuro A350F por ser un aparato más liviano y resistente. Resultante de la experiencia acumulada de Airbus en aeronaves cargueras, primero con la fabricación de los A300/A310F, luego con el A330-200F y ahora con las conversiones P2F (Passenger to Freighter) de los A320, A321 y A330, asegura que el nuevo carguero será una solución para la industria de carga.
“Podemos quitarle peso a la estructura del avión usando materiales avanzados, por ejemplo, el titanio. (Así), quitamos todo ese peso (adicional) de la aeronave y lo colocamos en la carga útil y eso significa ingresos adicionales (para el operador)”, comenta al medio. Agrega que el A350F consumirá un 40% menos de combustible en comparación con los B747F.
La nueva normativa de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) establece que no se podrán continuar fabricando los actuales cargueros después de 2027. Para el jefe de Marketing de Cargueros de Airbus, esa decisión y el desafío medioambiental impulsarán los pedidos de las líneas aéreas por una nueva generación de aeronaves.
Cambio generacional
Hamilton advierte un inminente cambio generacional en los grandes aviones cargueros. Primero está el reemplazo de los antiguos B747 de carga y luego otro proceso similar referido al B777F.
Aunque no lo menciona en la conversación con el medio, también se presenta el desafío de renovar todos los cargueros de media capacidad. En este segmento, están todas las aeronaves como los A300-600F, A310-300F, B767-300F, que son todavía utilizados por muchas líneas aéreas.
La renovación de flotas no sólo es importante por temas de sostenibilidad. Plantea que también debe entenderse y abordarse como una herramienta para crear fortalezas a la industria de carga ante los ciclos económicos adversos y que son más frecuentes. Por lo mismo, menciona que la reducción de los costos operativos es necesario para que el negocio de carga sea viable.
“Si observa dónde están los precios actuales del combustible y los riesgos que rodean esos precios, el A350F le brinda una cobertura instantánea, porque los costos de combustible son muy bajos en comparación con los aviones que se operan actualmente”, dice.
Fotografía portada – Simón Blaise O.