Pentágono vuelve a autorizar las entregas del F-35

Lockheed Martin podrá volver a entregar F-35 Lightning II. El sábado 08 de octubre, el Pentágono otorga una exención que permite la utilización de un componente con aleación de origen chino. La reanudación de las entregas se produce después de una revisión de un mes.

La exención se trata de una solución temporal al inconveniente político presentado. Mientras tanto, Honeywell -el proveedor del componente cuestionado- deberá buscar una solución alternativa y que se ajuste a la normativa de los Estados Unidos.

Honeywell y Lockheed Martin están contra el tiempo. La autorización aplica hasta que se acepte la última aeronave del Pentágono y se realiza sólo por “interés nacional”. Según Reuters, eso debe ocurrir antes de octubre de 2023.

Desde Honeywell señalan que trabajarán para encontrar una fuente alternativa del metal. Una vez conseguida, será utilizado en la fabricación de futuras bombas de combustible.

El problema

En septiembre, el Pentágono suspende temporalmente las entregas de Lockheed F-35A Lightning II luego que funcionarios descubriesen que uno de los componentes contiene materiales producidos en la República Popular China. Si bien el Departamento de Defensa de los Estados Unidos indica que el componente cuestionado no afecta la aeronave, la presencia de este levanta preocupaciones que merecen ser investigadas.

El objetivo de la investigación es asegurar que el componente como los materiales utilizados fabricado en China no representan ningún riesgo.

Luego del descubrimiento, la Agencia de Gestión de Contratos para la Defensa (DCMA) notifica a la Oficina del Programa Conjunto (JPO) que los componentes no cumplen con las disposiciones del Gobierno de los Estados Unidos por el hecho de estar producidos en la República Popular China.

El componente es un imán que se utiliza en las bombas de la turbo máquina de los cazas. El componente forma parte del paquete de energía integrado (IPP) que sirve para el arranque del motor y el suministro de aire para enfriar los sistemas de la aeronave. También sirve para que la turbomáquina funcione como Unidad de Potencia Auxiliar (APU) proporcionando energía al avión cuando está en tierra o durante emergencia.

Fotografía portada – Lockheed Martin

Destacados

Noticias Relacionadas