Después de más de dos años de severas restricciones, el Gobierno de Chile del Presidente Gabriel Boric, elimina la mayoría de las medidas impuestas bajo justificación de la pandemia del COVID-19. Si bien el anuncio es tardío en comparación a otros países, se trata del cambio más importante que permitirá impulsar la reactivación de muchos sectores incluyendo la aviación y el turismo.
De acuerdo con la última decisión del Ministerio de Salud, a partir del 1º de octubre queda sin efecto el Pase de Movilidad para todos los ciudadanos chilenos y extranjeros. También se dejan de ocupar mascarillas en ambientes públicos y cerrados, así como en el transporte público. Esto incluye la eliminación del requisito obligatorio de usar mascarillas en los aviones, por lo que la experiencia de viaje vuelve a la normalidad.
Las medidas venían siendo tremendamente anheladas por millones de personas y numerosos gremios, como la aviación, el turismo, los eventos, la hotelería y la gastronomía, entre muchos otros. Para todos estos, el cambio deja atrás las adversas decisiones tomadas por la administración de Sebastián Piñera que innecesariamente perjudican a millones de personas y sectores productivos, afectando no sólo las economías personales sino que también la del país y a la sociedad chilena.
Volar sin mascarillas
Como se indica, a partir del 1º de octubre de 2022, el uso de mascarillas no será obligatorio en los aviones en vuelos domésticos e internacionales así como en los tránsitos por los aeropuertos chilenos. Como en muchos países, el uso queda a discreción de las personas.
En consecuencia, el personal de los aeropuertos como de las líneas aéreas no podrán imponer el uso obligatorio de los barbijos a los viajeros. En el último tiempo, las indicaciones permanentes del personal aeronáutico generan molestia a los pasajeros y afectan la experiencia de viaje, especialmente, cuando las exigencias se hacen reiterativas.
Con el fin del cuestionado Pase de Movilidad, también se vuelve a permitir viajar a todas las personas independiente de su estado de vacunación. Chile tiene a la fecha más del 91% de la población totalmente vacunada contra el COVID-19, incluso con cuatro dosis, cantidad superior a cualquier otro país en el mundo. La administración de las vacunas coaccionada a la habilitación de un Pase de Movilidad determinado por el Estado, discrimina a los ciudadanos chilenos privándolos de realizar diversas actividades, incluyendo la libertad de desplazamiento o de viajes.
El fin de las mascarillas y del Pase de Movilidad no debe representar riesgos para la salud. Actualmente, en muchos países del mundo y líneas aéreas, ya no se utilizan barbijos por lo que mantenerlos hace que la medida carezca de toda lógica.
Los aviones son ambientes seguros
La política de uso de las mascarillas a bordo de los aviones responde a una medida de protección adicional que la industria aérea adopta como parte de las medidas impuestas por los Gobiernos. Inicialmente, su uso se justifica y se defiende ante la falta de información del virus SARS-CoV-2, su transmisión y la falta de herramientas para combatirlo.
A diferencia de otros medios de transporte como los buses o los trenes, los aviones de líneas aéreas cuentan con los filtros HEPA (High Efficiency Particulate Air) que reciclan el aire en cabina y eliminan el 99,995% de gérmenes incluyendo bacterias y virus con partículas del rango de 0,1 a 0,3 micrones. La acción de los filtros incluye el SARS-CoV-2 que por su “gran tamaño” logra ser filtrado por estos equipos.
La evidencia científica demostrada a lo largo de la pandemia, incluso bajo los meses más críticos, indica que el riesgo de contagio a bordo es mínimo. Según las estadísticas, menos del 1% de las personas se puede contagiar en un avión. A la fecha, la industria aérea indica que dicho porcentaje se reduce por el carácter endémico del virus y el proceso de vacunación.
Situación de fronteras
Los cambios anunciados por el Ministerio de Salud forman parte de la fase de “Apertura” del plan “Paso a Paso”. En esta fase, se establece que para ingresar a Chile sólo se pedirá esquema completo de vacunación o un PCR negativo 48 horas ante del embarque para viajeros no residentes. Al ingresar al Chile, se realizará un testeo aleatorio solamente a residentes que no debe ser superior al 5% de los viajeros.
La eliminación de la prueba PCR aleatoria es la última restricción de Chile. Si bien la probabilidad de ser escogido y dar positivo es reducida, sigue siendo motivo de incertidumbre para los viajeros extranjeros. No obstante, se consideran que las medidas recientemente anunciadas por el gobierno debieran favorecer un mayor dinamismo en la recuperación de la aviación y el turismo.
Con el fin de casi todas de las restricciones, las autoridades deben volver habilitar a todos los aeropuertos de las ciudades de Chile para vuelos internacionales. De acuerdo con la normativa chilena, las exigencias para que un aeródromo tenga vuelos internacionales debe disponer servicios de migración, Aduana y Servicios Agrícola y Ganadero (SAG).
Fotografía portada – Ricardo J. Delpiano