Líneas aéreas piden al Gobierno y al Congreso certezas tras resultados del Plebiscito en Chile

A través de la Asociación Chilena de Líneas Aéreas (ACHILA), las principales líneas aéreas chilenas y extranjeras que operan en Chile expresan la necesidad de que las autoridades entreguen certezas respecto al futuro político del país. Independiente de cuál sea el mecanismo para definir una nueva Constitución, enfatizan la importancia de contar con un escenario claro para retomar el crecimiento y la competitividad.

Para ACHILA, resultado electoral obtenido respecto a la propuesta constitucional presentada por la Convención Constituyente es una “señal fuerte y clara”, según consta en el diario El Mercurio (05/09/2022). Tras el resultado, insta a los actores políticos a llegar acuerdos de cara al futuro para que el sector privado pueda tener certezas.

“Es necesario que el Gobierno y el Congreso entreguen mensajes de certidumbre hacia el futuro con el objetivo de retomar el crecimiento y la competitividad”, señala Cristóbal Lea-Plaza, gerente general del gremio.

El proceso constituyente de Chile se da en un clima de alta polarización política los más significativos desde el retorno a la democracia en 1990. Surge como respuesta a la violencia política con rasgos insurgentes de octubre 2019 y meses siguientes, ante la incapacidad del gobierno de turno por atender y contener los distintos movimientos en curso.

Tras un acuerdo transversal firmado por la mayoría de los partidos en noviembre 2019, se opta un nueva Carta Magna en un plebiscito de entrada que da paso a la creación de una Asamblea Constituyente elegida democráticamente en mayo 2021. Sin embargo, la propuesta no es aceptada por la ciudadanía la que en un plebiscito de salida, decide rechazar el texto fundamental. De acuerdo con los resultados del Servicio Electoral de Chile (SERVEL), la opción “Rechazo” obtiene el 61,9% de los votos frente al 38,1% de la opción “Apruebo”.

Todavía no está claro el mecanismo cómo Chile definirá su futuro político. El acuerdo constitucional entre los partidos políticos de noviembre 2019 establece que en caso de ser rechazada la nueva propuesta electoral se mantiene vigente la Constitución actual. Sin embargo, la decisión transversal de la clase política es proceder con un nueva Carta Magna.

Para ello, entre las alternativas que se consideran están una iniciativa del Congreso, un comité de expertos constitucionalistas o una nueva convención más acotada. Si bien hay manifestaciones de sectores políticos para una nueva Constitución, no hay un mecanismo acordado. No obstante, hay consenso que este debe definirse rápidamente.

El sector privado chileno -incluyendo las líneas aéreas que operan en el país-, llama a la búsqueda del diálogo para dejar atrás la polarización política. Tras la crisis de 2019 y la situación provocada por las restricciones de la pandemia, piden volver a poner el foco en el crecimiento.

“Habrá una mayor certeza una vez que la clase política acuerde el cronograma constitucional hacia adelante”, agrega Lea-Plaza. “Pero la verdadera certidumbre se generará cuando la ciudadanía apruebe un buen texto constitucional, algo que todavía se ve lejano. El verdadero desafío está en lograr acuerdos y que el país retome las conversaciones relacionadas con el crecimiento y el desarrollo y logremos una buena prosperidad para todos los chilenos”.

Como muchos sectores, la problemática constitucional afecta directamente a la aviación. Las implicancias de la elaboración de una nueva Carta Magna son transversales porque pueden suponer cambios en el modelo de desarrollo, estructuras de propiedad, seguridad, estabilidad política, las relaciones internacionales con otros Estados, los acuerdos comerciales, entre otros.

Si bien las líneas aéreas buscan atender la conectividad, la estabilidad política y certezas económicas son fundamentales para asegurar la demanda necesaria para la sostenibilidad de los negocios y operaciones aéreas.

Fotografía portada - Simón Blaise O.

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