KLM recuperará la capacidad de 2019 en la ruta a Santiago

Como parte de un reforzamiento de la capacidad en la ruta, KLM informa que desde el 20 de junio aumenta las frecuencias en la ruta Ámsterdam – Buenos Aires (EZE) – Santiago. De acuerdo con la programación de la compañía, la oferta pasa de seis a siete vuelos semanales (un vuelo diario) lo que en la práctica se traduce en la recuperación de la capacidad de 2019.

Los vuelos se realizan en aeronaves Boeing 787-9 con capacidad para 294 pasajeros distribuidos en dos clases. A la semana, la oferta queda en 4.116 asientos compartidos entre Buenos Aires y Santiago.

Se trata del segundo aumento importante que KLM realiza en los vuelos a Chile, pese a que el país todavía mantiene importantes barreras de entrada que impiden la recuperación de la demanda de viajes internacionales. Sin embargo, la compañía ve una necesidad de las personas por viajar, tanto desde Chile como desde Argentina, lo que estaría impulsado los aumentos de capacidad.

No existen a la fecha datos actualizados de la operación de la línea aérea de los Países Bajos en la ruta a Santiago. Los últimos divulgados por la Junta Aeronáutica Civil (JAC) del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT) muestran que hasta febrero se movilizan 13.402 pasajeros lo que representa una caída del 64,0% respecto a 2019. Mensualmente, transporta 6.338 pasajeros lo que representa una caída del 66,4% respecto a los niveles previo a la pandemia. No obstante, dicha operación no es comparable ya que corresponden a la ruta sin escalas Santiago – Ámsterdam atendidas con B777-200ER.

Con Chile afectado por restricciones de ingreso, es altamente probable que el aumento de la operación esté impulsado por Argentina. Salvo excepciones, el país trasandino es el que condiciona la ruta de la línea aérea de los Países Bajos.

Factores que explican el retorno a la normalidad

Si bien la demanda es condicionante para aumentar las operaciones en algún destino en particular, la acción también puede responder a eficiencias que las líneas aéreas deben hacer con sus recursos. En ese sentido, aparecen factores como la reactivación de la demanda global a medida que los países flexibilizan o eliminan las restricciones político-sanitarias impuestas por COVID-19 y se reactiva la flota detenida o aumenta su uso.

Por el modelo hub que KLM utiliza, es necesario considerar que no todos los pasajeros originados en Santiago o Buenos Aires tienen como destino Ámsterdam o viceversa. Probablemente, gran parte del pasaje en este caso corresponda a un tráfico de conexión. Según la propia línea aérea en sus operaciones en Santiago previas a la pandemia, la mayoría de los viajeros tiene como destino países en el Norte de Europa. Sólo a modo de referencia, Air France llega a mantener en la ruta a Santiago alrededor de un 55% de pasajeros en conexión.

Entre el 27 de marzo y el 29 de octubre, periodo que comprende la temporada del verano europeo, KLM considera una red conformada por 167 destinos. De ese total, 96 corresponden a ciudades europeas y 71 a puntos intercontinentales. El aumento de destinos y la cantidad de frecuencias pueden impulsar la demanda de un destino en particular, independiente de factores locales (aunque estos no dejan de ser significativos).

KLM dispone de seis Airbus A330-200, cinco A330-300, 15 B777-200ER, 16 B777-300ER, 13 B787-9 y cinco B787-10. Estos aviones se utilizan en rutas medias de alta densidad (como Norte de África o Medio Oriente) y los vuelos intercontinentales. Datos de la industria muestran que sólo un A330-300 y un B787-9 están detenidos, lo que confirma la reactivación de la flota global que debe ser ubicada en toda la red.

Fotografía - KLM

En términos generales, la línea aérea indica que la capacidad intercontinental aumenta en 17% respecto al mismo periodo de 2021 como respuesta a una tendencia al alza de las reservas. Este escenario se manifiesta en los vuelos al Caribe, los Estados Unidos -cuya oferta es igual a la del verano de 2019- y América Latina.

En la región, la mayoría de las rutas sudamericanas están en niveles de capacidad previos de pandemia, no así en demanda. Hay vuelos diarios a Ciudad de Panamá, Lima y Sao Paulo (GRU) y al menos seis frecuencias semanales a Quito y Guayaquil, Bogotá y Cartagena, Río de Janeiro. Buenos Aires y Santiago se suman tarde a la tendencia.

Productos de las restricciones estrictas en muchos países de Asia, la capacidad varía. Hay aumentos de cantidad de asientos hacia la Bali, Bangkok, Manila y Singapur. Con las flexibilizaciones de las restricciones en India también se proyecta más frecuencias a Nueva Delhi y Mumbai. La carga en bellies (bodega en aviones de pasajeros) es lo que está sosteniendo la operación en estos mercados ante la falta de pasajeros.

Los mercados más complejos en Asia son China por las restricciones de cuarentena que impone su Gobierno y Corea del Sur y Japón. En estos últimos, las limitaciones guardan relación a la extensión de la operación por no operar en el espacio aéreo ruso, lo que incrementa los costos.

En África, también hay un aumento de operaciones. La compañía reconoce un aumento de capacidad en muchos destinos para atender el tráfico V.F.R., placer y en menor medida el tráfico corporativo. En respuesta al segundo componente de viajeros suma Zanzíbar como destino en esa parte del planeta.

Respuesta a la competencia

El aumento de la operación a diario en la ruta a Buenos Aires (EZE) y Santiago es también una forma de responder a la competencia y no quedarse bajo a esta. Si bien en la capital chilena los competidores en el tráfico hacia y desde Europa se han reducido, incluyendo la oferta semanal, en Argentina parecen retornar más rápidamente.

En Santiago, KLM tiene como competidores a British Airways e Iberia y LATAM, además de asegurar su propia demanda respecto a Air France (pese a que ambas son complementarias). Sólo las líneas aéreas europeas son una competencia más directa ya que la oferta de la línea aérea chilena es terminal en el Viejo Continente. A diferencia del periodo previo a la pandemia no cuenta con Alitalia ni con Level.

En Buenos Aires, la oferta aérea con Europa se encuentra al 70%. La competencia es intensa con Air Europa y British Airways operando diario (esta última vía Sao Paulo-GRU), Air France con cinco frecuencias semanales, Iberia con 12 vuelos semanales, además de las operaciones de Level que tiene a la capital argentina como único destino en Sudamérica. Aerolíneas Argentinas también desempeña un papel importante y si bien su tráfico es más punto a punto, al ser miembro de SkyTeam puede gestionar un mayor tráfico de conexión a través de Madrid (Air Europa). Para mediados de año, se prevé el aterrizaje de ITA Airways en la ruta a Roma (FCO). A esta fuera se agrega el factor no menor de Turkish Airlines que también gestiona un tráfico de conexión importante tanto hacia Europa como otras partes del mundo.

Fotografía portada - Simón Blaise O.

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