Ryanair espera que los precios de sus pasajes aéreos suban en promedio entre un 5% a un 10% respecto a los niveles de 2019. Michael O’Leary, CEO de Ryanair, anticipa que las alzas son como consecuencia de una combinación de factores entre los que están una reducción de la capacidad ofrecida (medida en ASK) y un aumento progresivo de la demanda.
“Creo que las tarifas aumentarán este año en los meses pico de verano entre un 5% y un 10%”, dice O’Leary. El directivo también indica que actualmente tiene precios más bajos que en 2019, lo que se relaciona más con una estrategia comercial específica para volver impulsar los viajes tras el término de las restricciones político-sanitarias impuestas en Europa. El alza de los precios está considerada para el periodo julio a septiembre 2022.
Si bien Ryanair menciona a la capacidad ofrecida y la demanda como factores condicionantes, no se debe descartar el impacto del alza del precio del petróleo que en otros mercados, como los Estados Unidos, por ejemplo, también anticipan precios de los pasajes aéreos más altos. En el país norteamericano, las líneas aéreas ya anuncian que durante este año traspasarán sus costos a los usuarios.
Para la temporada alta de viajes de verano en Europa, la firma de ultra bajo costo y tarifas bajas (ULCC, por sus siglas en inglés) señala que la demanda está “muy sólida” lo que confirma la tendencia de recuperación de los últimos meses. Como reflejo, la compañía indica que en febrero por primera vez, supera los niveles de demanda previos a la pandemia lo que califica como una “buena noticia”.
“Los viajes se están recuperando con fuerza. Creo que la gente está harta. Hemos estado encerrados en casa durante los últimos dos años por llamadas de Zoom. Todos quieren volver a viajar y las familias quieren volver a irse de vacaciones”, señala.
Para el CEO de Ryanair, la situación del COVID-19 no ha terminado del todo para las líneas aéreas. Desde su perspectiva, asumir esa realidad para la industria aérea sería algo muy optimista. Sin embargo, no espera ningún tipo de “susto” o “revés” para el sector de los viajes, ya que muchos países están terminando con las restricciones, incluso cuando aparezcan nuevas variantes del virus del SARS-CoV-2.
Fotografía portada - Ryanair