Con el objetivo de ampliar la conectividad de Alaska y ofrecer conexiones eficiente entre Norteamérica y Asia, Northern Pacific Airways comienza su carrera de despegue con miras a iniciar operaciones en la segunda mitad de 2022. En un masivo evento realizado en San Bernardino, California, la nueva compañía presenta su primer Boeing 757-200, aeronave escogida para la primera etapa de la empresa.
Replicando modelos exitosos como los de Icelandair en el Atlántico Norte o Copa Airlines en América Latina, Northern Pacific Airways pretende desarrollar un hub único en Anchorage, Alaska. Aprovechando ventaja geográfica del Estado más septentrional de los Estados Unidos, pretende acortar los tiempos de viaje ofreciendo vuelos más directos entre nuevos pares de ciudades con conexiones eficientes y altamente convenientes para los pasajeros a ambos lados del Pacífico.
Considerando las drásticas restricciones que existen todavía en muchos países de Asia, la compañía pretende iniciar operaciones en la segunda mitad de 2022, específicamente en el tercer trimestre. Sin embargo, en la empresa consideran que hay más oportunidades que desafíos.
“Vamos la situación del COVID-19 alrededor del mundo como una oportunidad, más que un desafío. En el escenario tradicional de las líneas aéreas teníamos dificultad para ingresar en términos de slots, restricciones en algunos aeropuertos, uso de puertas, etc. Hoy, eso no está presente y podemos tomar ventaja de ello”, comenta Rob McKinney, CEO de Northern Pacific Airways en entrevista con Aero-Naves. “Creemos que el mundo tiene que volver a la normalidad en algún momento. Tenemos planes flexibles para comenzar, pero si los tiempos cambian podemos ajustarlos. Sin embargo, tenemos una ventana de oportunidades para aprovechar”.
La estrategia de Northern Pacific es disponer una flota de 15 aeronaves de fuselaje angosto. No obstante, hacia mediano o largo plazo no descartan migrar a una flota de aviones de doble pasillo dependiendo de la evolución de la demanda. En ese contexto, el B757 es una base para escalar hacia el futuro. “Estamos en conversaciones con Boeing y Airbus para considerar el B737 MAX 9 o el A321XLR”, añade McKinney.
Pese a sus años, el B757-200 sigue siendo un avión competitivo para comenzar. En los Estados Unidos es una tecnología probada que cuenta con un amplio respaldo técnico y operacional, además de ser una aeronave fácil y rápida de adquirir a bajo costo producto de la renovación de flotas de otras líneas aéreas. Además, su capacidad de carga y alcance permite atender rutas medias operando tramos de hasta nueve horas de duración sin ningún tipo de restricciones.
Buscando ser un actor de cambio en las rutas transpacíficas, la estrategia de Northern Pacific Airways apunta a desarrollar un producto del tipo LCC, especialmente en lo que respecta a tarifas. Sin embargo, en la presentación de su primera aeronave, McKinney confirma que la flota estará configurada con tres productos: Premium, Economy Plus o Premium Economy y Economy, a fin de abarcar distintos segmentos de usuarios.
Otra estrategia a utilizar es sacar ventaja de Anchorage como hub. A diferencia de lo que ocurre con la carga aérea, para Northern Pacific Alaska no estaría siendo bien aprovechada como punto de conexión entre Norteamérica y Asia para el transporte de pasajeros, escenario que confirma la ventana de oportunidades que existe para la compañía. “Vamos a ofrecer una mejor alternativa para ingresar en los Estados Unidos, con migración en Anchorage, Alaska, con procesos mucho más expeditos que en otros aeropuertos, evitando las largas filas que se producen en Los Ángeles u otros aeropuertos. Además, Alaska ofrece muchas oportunidades como destino que muchas veces la gente no considera”, dice su CEO.
Con el fin de agregar valor a su propuesta y ampliar el alance de la compañía hacia otros mercados en Asia o incluso Latinoamérica, Northern Pacific Airways evalúa la posibilidad de establecer acuerdos con otros operadores. Incluso no descartan la posibilidad de establecer futuros acuerdos de negocio conjunto.
Por ahora, Northern Pacific Airways celebra haber alcanzado su primera meta: disponer de su primer avión y cerrar acuerdos estratégicos con empresas como Certified Aviation Services LLC (CAS) responsable de la pintura y chequeo de la flota o AerSale. “Queremos ser una línea aérea con espíritu innovador, joven. El livery representa parte de ello. Tendremos una oferta Premium de entretenimiento a bordo”, dice McKinney.
En la presentación de su primer B757-200, Northern Pacific plasma un diseño innovador para reflejar la belleza natural de Alaska. El negro y blanco muestran los contrastes de Alaska, las curvas de la pintura la curvatura de la Tierra que desde Anchorage permite alcanzar varios destinos. También en los winglets incorpora colores verdes y turquesa que representa la aurora boreal. En el timón vertical, incluye la letra “N” que es el logotipo de la empresa.
Fotografía portada – Ricardo J. Delpiano