La Fiscalía del Estado de Sao Paulo solicita a la Corte Suprema de Brasil declarar en quiebra a la línea aérea Itapemirim Transportes Aéreos, compañía que el 17 de diciembre de 2021, suspende todas sus operaciones. En la solicitud se considera también el bloqueo de activos de Sidnei Piva, propietario del Grupo Itapemirim, cuya división de transporte terrestre se encuentra en un proceso de reestructuración judicial desde 2016.
El dictamen se presenta como parte de la reorganización judicial de la línea aérea. Sin embargo, el Ministerio Público de Sao Paulo también considera declarar en quiebra a todo el grupo por la situación judicial que atraviesa. Dicha solicitud elevada en los primeros días de 2022 no es considerada por la Corte.
La Fiscalía quiere que ITA Transportes Aéreos sea incluida en la reestructuración general del grupo. Iniciado en 2016, Grupo Itapemirim presenta un plan que es aprobado por la Corte Suprema de Brasil en 2019, pero hasta la fecha no lo logra cumplirlo, agravando la situación.
Después de iniciar sus operaciones a fines de junio 2021, ITA suspende sus operaciones con el fin de someterse a un proceso de reorganización interna. Entre las razones que podrían explicar la decisión está la falta de pagos a proveedores estratégicos. A modo de ejemplo, la empresa de handling Orbital le habría suspendido los servicios de rampa hasta que la línea aérea no regularice los pagos.
Si bien la compañía aérea argumenta que la suspensión de operaciones se realiza informando Agencia Nacional de Aviación Civil (ANAC) con el propósito de asegurar asistencia a los pasajeros, la paralización improvista genera disconformidad y caos entre los pasajeros afectados. Por lo mismo, el organismo de defensa del consumidor de Brasil evalúa multas a la empresa, que incluyen también la obligación de cancelar gastos adicionales y daños morales, si los pasajeros afectados no son ubicados en otro vuelo al destino que corresponde o no reciben el reembolso por el total pagado.
ITA también enfrenta una reducción del 30% de su flota con la devolución de dos Airbus A320. El resto de los aviones pertenecientes a las empresas de leasing ALAFCO, Carlyle Aviation Partners y Hi Fly Malta se estarían almacenando en Río de Janeiro (GIG) para un mantenimiento a la espera de su futuro.
En los seis meses de funcionamiento, la red de ITA conecta Sao Paulo (GRU), Brasilia, Belo Horizonte (CNF), Río de Janeiro (GIG), Porto Alegre, Porto Seguro, Salvador, Curitiba, Fortaleza, Florianópolis, Maceió, Natal y Recife, principalmente con vuelos punto a punto. La propuesta de la compañía es replicar el modelo de transporte terrestre en el cielo con un modelo de tarifas bajas que contribuya a la democratización del viaje en avión. Para diferenciarse de la competencia, propone una experiencia basada en la comodidad del viajero y una calidad de servicio, pero sin incurrir en el uso de los servicios complementarios, restándole oportunidades de generar ingresos adicionales.
ITA califica como una compañía de sólo tarifas bajas. La experiencia en la industria indica que este tipo de modelo de línea aérea no es posible sostenerlo sin una buena fuente de ingresos que permitan cubrir los costos asociados. Por lo mismo, la mayoría de las líneas de estas características fracasan al poco tiempo.
Fotografía portada – Luis Alberto Neves