Después de una salida temporal de siete meses, Ethiopian regresa a Buenos Aires (EZE) desde el 08 de enero. De esta manera, la línea aérea recupera también su segundo destino regular de pasajeros en Sudamérica, después de Sao Paulo (GRU).
En junio, Ethiopian suspende sus servicios de pasajeros a Argentina debido a los extensos cierres de fronteras impuestos por la administración de Alberto Fernández. La razón está en que las restricciones políticas impiden contar con una demanda mínima que asegure una viabilidad de la operación. Por la incertidumbre, en su momento se considera que una extensión de la medida podría significar una posible salida del país como otros operadores.
En su momento, la compañía justifica también su decisión en las reiteradas decisiones administrativas de las autoridades argentinas al autorizar, mes a mes y de manera arbitraria, los vuelos que pretenden realizar las compañías aéreas. Además de operar con una capacidad limitada, producto del cierre de fronteras vigente en 2020 y 2021, dichas restricciones dañan el transporte aéreo, con incertidumbres en la programación, cambios de horarios que restringen las posibilidades de conexión y cancelaciones de vuelos.
Con la apertura de fronteras en noviembre para todos los extranjeros completamente vacunados contra el COVID-19, el escenario cambia favorablemente, aunque sin ser el óptimo. De esta manera, la línea aérea etíope propone reanudar sus servicios en diciembre, pero se ve impedida de hacerlo por una negación de las autoridades argentinas bajo el argumento de la variante Omicron del SARS-CoV-2 y su origen en los países del sur de África.
La entrega de los permisos para que Ethiopian vuelva a operar se interpreta como un intento de recuperar la normalidad, considerando que la variante Omicron, pese a su mayor capacidad de contagio, no representa riesgos mayores en términos de hospitalizaciones y fallecimientos, según indican los estudios científicos. Con el reingreso de esta línea aérea, el país transandino recupera la conectividad perdida con África y más allá a través del hub de Addis Abeba.
De acuerdo con la programación, Ethiopian tiene programados tres vuelos semanales en la ruta Addis Abeba – Sao Paulo (GRU) – Buenos Aires (EZE) con equipos Boeing 787-8. La capacidad semanal para estos meses está prevista en 1.620 asientos compartidos en toda la ruta en ambos sentidos.
Tras la salida de Emirates y Qatar Airways, la oferta de Ethiopian Airlines toma relevancia en Argentina al ser la única línea aérea en proveer un enlace directo con África y ofrecer conexiones a distintos puntos de ese continente, así como Medio Oriente y Asia. Prácticamente, es una competencia directa a la presencia de Turkish Airlines. A fecha de hoy, es la única línea aérea que logra convertir a África en un puente aéreo entre Sudamérica y Oriente, tras no concretarse proyectos de otras empresas.
La operación en Brasil como en Argentina forma parte de la estrategia Vision 2025 de Ethiopian Airlines para posicionarse como una línea aérea global. Su aterrizaje en Argentina en 2018 también se entiende como el resultado de gestiones políticas realizadas bajo el gobierno de Mauricio Macri para mejorar la conectividad internacional de Argentina a través de la aviación.
Fotografía portada - Boeing