Reconociendo que las cuarentenas y cierres de fronteras no son una solución para controlar un virus endémico, el Reino Unido elimina a todos los países de su lista roja de viajes. Se trata de un reconocimiento explícito a la pérdida de efectividad de la medida para ralentizar la propagación del SARS-CoV-2 y sus variantes.
Tras la aparición de la variante omicron del COVID-19, el Reino Unido coloca en su lista roja de países a 11 países de África. De esta manera, todos los viajeros provenientes de Angola, Botswana, Eswatini, Lesotho, Malawi, Mozambique, Namibia, Nigeria, Sudáfrica, Zambia y Zimbabwe, no tienen que realizar una cuarentena obligatoria en los hoteles sanitarios.
La medida permite un reimpulso para reactivar el transporte aéreo entre África, especialmente Nigeria y Sudáfrica, con el Reino Unido en plena temporada alta de viajes por las Fiestas de Fin de Año. Sin embargo, el escenario se mantiene bajo una alta incertidumbre ya que muchos países continúan colocando o manteniendo restricciones.
Cabe recordar que después de dos años de pandemia, el SARS-CoV-2 se encuentra presente a nivel global y cuando se descubre una variante nueva como parte de una evolución natural del microorganismo, esta ya está presente en la sociedad. Por consiguiente, imponer restricciones no se consideran medidas adecuadas.
Según la última actualización de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para los viajes internacionales, el establecimiento de prohibiciones no evitará la propagación de variantes del virus del COVID-19 y que la imposición de restricciones afectará la calidad de vida de las personas y sus medios de subsistencia. Para el organismo de las Naciones Unidas, los cierres de fronteras desincentivan que los países compartan datos y mejores prácticas en materia epidemiológica, trazabilidad y secuenciación del virus.
Pese a quitar a todos los países de la lista roja, el ministro británico de Salud, Sajid Javid, indica que se mantiene la obligación de la prueba de diagnóstico para detectar cualquier posibilidad de contagio. Las pruebas deben realizarse antes de embarcar al Reino Unido y a la llegada.
Desde la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) valoran la decisión de sacar a los países de la lista roja de viajes, pero critica la mantención de pruebas de PCR obligatorias por su alto valor. Para la industria aérea, así como también la OMS, las pruebas de salud no debieran aplicarse para las personas vacunadas, además de facilitar su accesibilidad ante los altos valores que posee, especialmente en países como el Reino Unido.
“Remover a los países de la lista roja es un comienzo, pero los viajeros del Reino Unido siguen enfrentándose a la posibilidad de tener sus casas vacías esta Navidad. Como Scrooge, no es tarde para este gobierno despertar y dar a los viajeros el presente que ellos quieren: desechar las carísimas pruebas PCR y parar esta pesadilla antes de Navidad”, dice Willie Walsh, director general de IATA.
IATA como otras organizaciones ligadas al transporte aéreo hacen un llamado a los Gobiernos a eliminar las restricciones de viaje impuestas tras el descubrimiento de la variable omicron del SARS-CoV-2. La asociación recuerda que son los propios Gobiernos que a través de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) junto con la OMS acuerdan protocolos temporales que deben ser revisados periódicamente para enfrentar la crisis.
“Es inaceptable que las decisiones apresuradas hayan creado miedo e incertidumbre entre los viajeros, ya que muchos están a punto de embarcarse en visitas de fin de año a familiares o en sus vacaciones ganadas con esfuerzo”, sentencia Walsh.
Fotografía portada – London Heathrow