El Comando de Movilidad Aérea de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos (USAF) amplía las capacidades del Boeing KC-46 Pegasus para reabastecer nuevas aeronaves. De esta manera, alrededor del 70% de los aviones con capacidad para recibir combustible en vuelo pueden ser atendidas con el nuevo tanquero.
Los nuevos aviones certificados para el KC-46 son el Lockheed AC-130J Ghostrider, KC-130J Combat, MC-130 Commando II, C-5 Galaxy y E-3G Sentry. La intención de la USAF es habilitar al Pegasus para atender gran parte de las misiones que se realizan y de esta manera ampliar la utilidad de la aeronave considerando el rol que desempeña que es reemplazar al KC-135 Stratotanker y KC-10 Extender.
La ampliación de capacidad anunciada sigue a las entregadas para los B-52, C-17 Globemaster III, los F-15 y F-16. Las autorizaciones no se entregan según un cronograma determinado, sino que responden exclusivamente a la confianza operacional que el tanquero va demostrando, previo a una evaluación cualitativa y cuantitativa por parte el Comando de Movilidad Aérea.
La USAF indica que de no ampliarse la capacidad del KC-46 Pegasus, los antiguos tanqueros tienen que continuar con la labor. Por consiguiente, no se está cumpliendo con el plan de renovación previsto.
La ampliación de capacidades es un voto de confianza al KC-46 considerando las deficiencias operativas que posee. Las mismas son cuestionadas por la propia USAF haciendo que la institución evalúa otras alternativas de aviones para el reabastecimiento de combustible con prestaciones similares al Pegasus.
Cabe recordar los KC-46 tienen inconvenientes operativos por sus bajos rendimientos y defectos en sus sistemas a bordo, incluyendo el brazo que conecta los aviones durante el procedimiento de reabastecimiento en vuelo. Debido a esto, la ampliación de capacidades se realiza de manera restringida.
El Comando de Movilidad Aérea de la USAF señala que continuará realizando misiones de entrenamiento, ejercicios y demostraciones para asegurar una mayor confianza operativa. De esta manera, se pretende asegurar que el KC-46 esté disponible en casos de misiones de respuesta ante una crisis o en caso de una guerra, todo mientras se trabaja con Boeing en soluciones a los inconvenientes presentados. A la fecha, el programa del KC-46 representa una pérdida para el fabricante por US$5 mil millones según precio de lista.
El KC-46 completa a la fecha más de 6.000 misiones de reabastecimiento entregando más de 17,1 millones de kilogramos de combustible a través de los distintos mecanismos que posee. La USAF considera adquirir 179 KC-46 bajo el programa KC-X para reemplazar a la mayoría de los KC-135 y KC-10.
Fotografía portada - USAF