Buscando generar eficiencias en su operación, Flybondi anuncia la incorporación de una quinta aeronave. Con la llegada de un B737-800 adicional, la primera línea aérea de bajo costo y tarifas bajas (LCC, por sus siglas en inglés) trasandina asegura estar recuperando la capacidad operativa que dispone antes de la pandemia.
Después de una suspensión temporal de operaciones en 2020 por las restricciones y una reorganización como empresa a través de la cual accede a contratos de arriendos de aviones más convenientes, Flybondi exhibe durante este año una reactivación significativa. A la fecha, cuenta con cuatro B737-800 con capacidad para 189 pasajeros los que le permite ofrecer un bajo costo por asiento – kilómetro recorrido (CASK) e incentivar la demanda a través de bajas tarifas.
Actualmente, opera a 14 destinos domésticos en Argentina: Buenos Aires (AEP), Bariloche, Corrientes, Córdoba, Jujuy, Mendoza, Neuquén, Posadas, Iguazú, Salta, Santiago del Estero, Trelew y Tucumán. Desde diciembre, considera retomar los vuelos internacionales aprovechando la temporada alta de viajes y la flexibilización de las restricciones de frontera en Argentina y países vecinos abiertos. Florianópolis, Sao Paulo (GRU), Río de Janeiro (GIG) y Punta del Este, conforman la red internacional de la temporada.
“Continuamos con nuestro plan de inversión y el crecimiento de la flota con la llegada del quinto avión. En julio incorporamos nuestro tercer avión y en septiembre el cuarto, lo que demuestra un compromiso sostenible de la compañía con nuestro propósito y con la industria aérea”, dice Mauricio Sana, CEO de Flybondi. “Con la incorporación de más aviones buscamos crecer y sumar nuevos destinos. En enero comenzaremos a volar a Ushuaia y en diciembre empezamos con los vuelos regionales a Uruguay y Brasil”.
El plan de crecimiento de la LCC argentina considera la llegada la quinta aeronave para enero y una sexta para febrero o marzo. De confirmarse los planes, la capacidad operativa y posiblemente la cantidad de asientos disponibles (ASK), podría ser sólo crecimiento a partir del sexto avión.
Además de generar economías de escalas que favorezcan a la reducción de costos, la incorporación de aviones es necesario para enfrentar la competencia, tanto de la estatal Aerolíneas Argentinas como de JetSMART, su competidor más directo y que recientemente suma un quinto avión. Se espera que con dos aeronaves adicionales, más un posible incremento en la tasa de uso de las aeronaves Flybondi pueda incrementar frecuencias a los destinos que ya opera o abrir nuevas rutas o ciudades.
Según expone la empresa, los resultados preliminares de 2021 demuestran una recuperación del mercado doméstico. Flybondi destaca la operación desde el Aeroparque de Buenos Aires como un aporte al mejoramiento de la ocupación de los vuelos por la conveniencia de estar en el centro de la capital argentina. Cabe recordar que durante 2020, la compañía mantiene un conflicto con la administración de Alberto Fernández por el cierre de El Palomar para vuelos comerciales. En octubre, señala que obtiene una ocupación del 93%, cifra récord para lo que va del año.
La reactivación alienta la incorporación de material de vuelo adicional y aumento de capacidad. “Esto es posible gracias a la demanda que estamos viendo en el mercado, lo que marca una importante recuperación del turismo, con muy buenos números tanto para la temporada de verano como para los próximos meses”, dice Sana.
Fotografía portada - Flybondi