En un contrato calificado como “histórico”, Dassault Aviation vende 80 cazas Rafale F4 a los Emiratos Árabes Unidos. El país árabe se convierte en el primer operador de esta versión del modelo fuera de Francia, el cual continúa en fase de ensayos.
La firma del acuerdo de compra se realiza con la presencia del Presidente de Francia, Emmanuel Macron y el Sheikh Mohammed bin Zayed Al Nahyan, príncipe herededo de Abu Dhabi. La presencia de los mandatarios refleja el carácter político de la adquisición. Los acompañan Eric Trappier, presidente y CEO de Dassault Aviation, y Tareq Abdul Rahim Al Hosani, CEO del Consejo Económico Tawazun, a cargo de las adquisiciones de seguridad y defensa de los Emiratos.
La adquisición de los Rafale F4 se enmarca dentro la continuación de una alianza estratégica entre ambos países, respaldada por una relación de confianza de más de 45 años entre la Fuerza Aérea de los Emiratos Árabes Unidos y Dassault. La compra de los Mirage 5 y 2000-9 se entienden en ese ámbito. Estos últimos se encuentran desde hace dos años en proceso de modernización en conjunto con el fabricante.
“La venta de 80 Rafale a la Federación de los Emiratos Árabes Unidos es una historia de éxito francesa”, dice Trappier. “Estoy muy orgulloso y feliz como resultado. Deseo agradecer a las autoridades de los Emiratos por la renovada confianza en nuestro avión. Tras el Mirage 5 y el Mirage 2000, este contrato de Rafale consolida la relación estratégica que une a nuestros dos países y la satisfacción de la Fuerza Aérea de los Emiratos, socio de larga data y exigente de nuestra empresa. Deseo subrayar la calidad y eficacia de la relación entre las autoridades francesas y la industria, que contribuyó a este éxito del equipo de Francia”.
Al igual como ocurre con algunos programas de aeronaves de línea aérea, como el Airbus A380, por ejemplo, sostenido por los pedidos desde el Emirato (en ese caso por Emirates), la compra del Rafale F4 busca apoyar el desarrollo de la industria aérea francesa como parte de una reactivación económica. No se trata de algo nuevo, ya que es un mecanismo utilizado por distintos países, como los Estados Unidos, para apoyar el desarrollo local a través de una economía de defensa o de guerra.
En el mismo comunicado Dassault Aviation reconoce el impacto que tendrá para distintos sectores económicos la compra del Rafale F4 por parte de los Emiratos Árabes Unidos. “Este contrato es una excelente noticia para Francia y su industria aeronáutica, para todo un ecosistema de 400 empresas, grandes y pequeñas, que contribuyen al desarrollo del Rafale”, señala.
La producción de los 80 cazas permitirá garantizar más de 1.000 puestos de trabajo en distintos sectores productivos de Francia por los próximos 10 años. Al mismo tiempo, asegura una base de producción industrial única en Europa con una importante participación de las pequeñas y medianas empresas (PYMES), las que aportan a un contratista principal (Dassault Aviation) en sus negocios militares o civiles.
Francia celebra el contrato con los Emiratos Árabes Unidos por reafirmar la excelencia de su industria aérea. Además, de la federación árabe, el Rafale está presente en otros cinco países, incluyendo Egipto, que desempeña un papel estratégico en el Medio Oriente.
Fotografía portada - Dassault Aviation