Buscando solucionar el problema histórico de renovación y recomposición de escuadrones de aviones caza de la Fuerza Aérea Argentina, el gobierno de Alberto Fernández incluye en el presupuesto de la Nación para 2022 unos US$664 millones destinos para adquirir hasta 12 cazas JF-17 Thunder Block III. Si bien no hay una postura oficial respecto a la aeronave seleccionada, la mención explícita del caza chino-pakistaní sugiere la intención que la compra pueda ser materializada en el más breve plazo.
De concretarse, Argentina dejaría atrás las ofertas de Rusia, los Estados Unidos e India, así como también de Israel. Cabe recordar que en 2015, se autorizan un presupuesto de US$360 millones para adquirir 14 IAI Kfir para renovar la flota de aviones caza. La administración de Mauricio Macri desestima esta compra. La compra también marcaría un incremento de la influencia China en Argentina y también en Sudamérica, convirtiendo al gigante asiático en un actor cada vez más relevante.
La consideración de los JF-17 en el presupuesto de 2022 se menciona en septiembre cuando el propio Ministerio de Defensa de Argentina menciona los cazas, pero que no define el sistema de armas a utilizar. Al respecto, precisa que cuenta con varias alternativas que busca definir para considerar la definición del avión y su respectivo financiamiento. La inclusión de estos aviones en el documento oficial presupuestario infiere que la decisión ya estaría tomada, aunque fuentes en Argentina indican que todavía podría haber cambios o sorpresas.
Aprovechando las relaciones políticas establecidas, principalmente bajo la administración de los Kirchner, una misión de la empresa estatal China National Aero-Technology Import & Export Corporation (CATIC) visita Argentina para ofrecer los JF-17. En esa ocasión se evalúan las características de la aeronave, sus prestaciones, sistemas de comunicaciones y armamento, además de las alternativas de financiamiento que se darían tanto para su adquisición como para el entrenamiento de pilotos, mecánicos y mantenimiento, sin descartar, también transferencia tecnológica.
El JF-17 Thunder (o Chengdu FC-1 Xialong, como se lo conoce en China) es un avión caza multirrol de peso ligero desarrollado conjuntamente por la Chengdu Aircraft Industries Corporation (CAC) de la República Popular China y el Pakistan Aeronautical Complex (PAC) de Pakistán. Las designaciones "JF" y "FC" se aplican para el "Joint Fighter" (Pakistán) y el "Fighter China" (China), respectivamente.
El programa conjunto comienza en 1999 con cada país asumiendo el 50% del total de los costos. CAC, por parte de China, se encarga del desarrollo del avión y su fabricación, mientras que PAC (Pakistán) se encarga de la producción de algunas partes, del servicio postventa y el mantenimiento. Originalmente, se lo concibe como un caza ligero, propulsado por un solo motor para reducir costos, diseñado como solución para renovar flotas de cazas obsoletos de países emergentes, con reducido presupuesto o con impedimentos políticos para adquirir material de otros países. Sin embargo, ante requerimientos de la Fuerza Aérea de Pakistán se le incorpora mayor tecnología y prestaciones.
La versión Block III es considerada como una alternativa a los F-16. Por consiguiente cuenta con una aviónica mejorada, nuevos sistemas de visión, pantalla multifuncional en el panel, un radar activo, sistemas infrarrojos de búsqueda y seguimiento, uso de materiales compuestos en su fuselaje, nueva planta motriz y dos variantes: monoplaza y biplaza. Puede desarrollar velocidades de hasta MACH 2.0 con un alcance en combate de 840 millas náuticas (1.352 kilómetros) y un techo de servicio de 55.000 pies (FL550).
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