Cumpliendo con las fechas anunciadas, el 31 de octubre, Air France inicia en la “era del Airbus A220”, al operar comercial su primera unidad de un total de 60 aeronaves encargadas. La primera ruta atendida es París (CDG) – Berlín, seguida de París (CDG) – Venecia. A medida que se incorporen las nuevas unidades, otras ciudades europeas y probablemente del Norte de África también se incorporen a las operaciones del nuevo avión.
Por el momento, Air France señala que la operación del A220 sigue con la inclusión de Madrid (desde el 1º de noviembre) seguida de Milán (LIN) a partir del 06 de noviembre. Otros destinos asignados para las próximas semanas son Boloña, Copenhague, Lisboa, Roma (FCO), entre otros.
Con 60 unidades a incorporar hacia 2025, el A220-300 llega para reemplazar a los A318 y A319. Configurado para 148 pasajeros dispuestos en una cabina flexible con una disposición de asientos 2-3, la nueva aeronave representa un crecimiento en todo sentido, considerando que los A318 cuentan con 131 asientos y los A319 con 143. Según cifras de la línea aérea también proporciona una reducción de costo por asiento del 10% y consume un 20% menos de combustible en comparación con los equipos que reemplaza.
Previo al inicio de sus operaciones comerciales, Air France inicia el retiro de los A318 con la salida de los dos primeros ejemplares. A fecha de hoy, cuenta con 14 aeronaves de ese modelo y 30 unidades del A319. El número de unidades encargadas y derechos de compara permiten efectuar una completa renovación en los próximos años.
La puesta de servicio del A220-300 coincide con la realización de la Cumbre de las Naciones por el Cambio Climático (COP26) que se lleva a cabo en Europa (Glasgow). Las eficiencias que incorpora la aeronave más la desprogramación de aviones más antiguos y menos eficientes permiten a Air France demostrar su compromiso con el medioambiente.
Para la compañía aérea gala, las características de la nueva aeronave desempeñarán un papel decisión en la reducción de la huella de carbono y en la materialización de sus objetivos de desarrollo sostenible. Cabe recordar que para 2030, espera conseguir una reducción de emisiones de CO2 por pasajero-kilómetro en un 50% respecto a 2005 o de 15% en términos absolutos. También reafirma el compromiso con lograr emisiones de CO2 netas para 2050 al igual que toda la industria aérea.
Air France señala que la renovación de la flota es fundamental para avanzar en el corto plazo a la descarbonización del transporte aéreo. Por lo mismo, desde la línea aérea explica que cada año contemplan una inversión de €1.000 millones para las llegadas de más A350-900 y A220-300. La utilización combinada de estos modelos permite llegar a reducciones de emisiones contaminante de entre un 20% y 25%.
En esa línea, el siguiente paso que Air France – KLM Group busca dar es la definición de los aviones que renovarán a los A320 y A321 de Air France y los Boeing 737-700/-800/-900ER de KLM y Transavia. Con el fin de asegurar una rápida transición, no se descarta que las futuras unidades para el segmento entre 150 y 220 asientos sean el A320neo, A321neo y B737 MAX 8 o MAX 9.
En el A220-300, Air France introduce las últimas innovaciones en cabina para vuelos de corta distancia aprovechando las oportunidades de configuración que ofrece la aeronave. Entre las novedades que destaca son las ventanas de mayor dimensión, una mejor iluminación ambiental con sistema mood lighting para acompañar las distintas fases de vuelo y compartimientos superiores de equipaje de gran volumen pensados para pasajeros en conexión con vuelos de larga distancia que suelen llevar una cantidad superior de equipaje de mano. Todos los asientos cuentan con un ancho de 48 centímetros y están equipados con puertos USB, una mesa sólida, portavasos y soporte para teléfonos celulares o tablets. Además dispone de conexión a internet WiFi accesible en todas las fases de vuelo.
Fotografía portada - Air France