Cumpliendo con el cronograma de licitaciones, el pasado 23 de agosto se publica en el Diario Oficial el llamado para la tercera concesión del aeropuerto El Loa de Calama. Mediante un nuevo concurso y posterior administración privado-pública, las nuevas obras permitirán triplicar la capacidad de la actual terminal de pasajeros.
De acuerdo con el Ministerio de Obras Públicas (MOP), la superficie de la terminal de pasajeros pasará de los actuales 9.763 metros cuadrados (m2) a unos 30.378 m2 por la habilitación de nuevos espacios en área pública (lado tierra) como en la zona restringida (lado aire). La futura nueva infraestructura pretende brindar una capacidad suficiente para movilizar hasta 4 millones de pasajeros por año lo que lo convierte en una de las terminales aéreas más importantes de regiones en Chile.
La concesión que se adjudique el proyecto deberá operar y mantener la infraestructura actual, como también mejorarla y ampliarla con el desarrollo de nuevas obras. Mediante el crecimiento de la terminal se aumentarán los estacionamientos de vehículos a casi el doble pasando de los 995 a 512, la colocación de 10 equipos de auto check-in y 12 nuevos counters para check-in tradicional totalizando 28 mostradores para las líneas aéreas.
En el lado aire, se considera la ampliación de las salas de espera, locales comerciales y servicios de alimentación, la habilitación de hasta siete puertas de embarque con posiciones de contacto (actualmente son tres) permitiendo satisfacer la cantidad de vuelos y el intenso flujo de pasajeros de épocas normales producto del tráfico corporativo, trabajadores de la gran minería y turístico. En paralelo, se ampliará la plataforma de estacionamiento de aeronaves comerciales al oriente y al sur permitiendo habilitar 11 posiciones de estacionamiento de aeronaves, ampliación de la plataforma de aviación general, la extensión de pista con nuevas calles de rodaje asociada, incluyendo la calle A (“Alpha”), ampliación del camino del Servicio de Salvamento y Extinción de Incendios (SSEI), caminos aeronáuticos, nuevo rodaje y plataforma para la Fuerza Aérea de Chile (FACh), y mejoramiento del sistema de saneamiento del lado aire y lado tierra.
Otras obras incluidas en la tercera concesión son la ampliación y modificación de la vialidad vehicular y peatonal de circulación interior del aeropuerto, la reubicación y ampliación de planta de tratamiento de aguas servidas, nuevas instalaciones eléctricas, reemplazo total de la señalética preexistente e incorporación de señalética en las nuevas áreas. También incluye trabajos en paisajismo, riego y cerco de seguridad del aeropuerto, entre otras. El nuevo edificio como todo el proyecto del aeropuerto está pensado para continuar en sintonía con el diseño del actual recinto, pero en mayores dimensiones.
El proceso de licitación contempla la recepción de ofertas técnicas y económicas para el 30 de diciembre de 2021 y la apertura de ofertas económicas para el 27 de enero de 2022, fecha en la cual se conocerá al ganador del concurso. El presupuesto estimado del proyecto está fijado en unos US$124,4 millones, cantidad de acuerdo con lo publicado en el Diario Oficial es referencial y no incluye Impuesto al Valor Agregado (IVA). El monto considera el valor nominal de las obras del contrato de concesión, incluyendo todos los costos del proyecto, gastos generales y utilidades, pagos a la concesión durante la etapa de construcción y los costos para la elaboración del proyecto de ingeniería definitiva.
Se espera que el proyecto sea adjudicado durante el primer semestre de 2022. A partir de ese momento, se inicial el proyecto de ingeniería de detalle para comenzar las nuevas obras en el transcurso de 2023. La construcción de la nueva terminal está pensada para 2025 y generará alrededor de 300 empleos directos mensuales.
La actual concesión a cargo del Consorcio Aeroportuario de Calama Sociedad Concesionaria (CACSA) inicia la administración del aeropuerto en marzo de 2011. En sus primeros años, ejecuta la construcción de una nueva terminal inaugurada en 2014 que aumenta los espacios de 2.240 m2 a los actuales 9.763 m2. La nueva infraestructura permite un mejoramiento significativo de la calidad de los servicios a los usuarios.
Actualmente, el aeropuerto El Loa posee tres rutas nacionales que conectan Calama con Santiago, Concepción y La Serena, las que son atendidas por LATAM, JetSMART y SKY. A estas se agregan vuelos chárter domésticos e internacionales. Previo a la pandemia, disponía también de vuelos internacionales con una ruta regular a Lima operada por LATAM y vuelos chárter.
Con relación a la cantidad de pasajeros transportados respecto a 2019, la ruta Santiago – Calama mantiene en el periodo enero-julio una baja de 60,0%, Concepción – Calama una caída de -8,8% y La Serena – Calama un crecimiento de 28,6%. El tráfico de pasajeros es principalmente corporativo y de trabajadores asociados a la gran minería, seguido de viajes V.F.R. y de placer a nivel doméstico. Por el cierre de las fronteras establecida por la administración Piñera no hay turistas internacionales, así como tampoco no se vislumbra panorama para reactivar la única ruta internacional, lo que para la zona representa un retroceso significativo.
El cronograma de obras debiera permitir disponer de una infraestructura adecuada para cuando los niveles de demanda vuelvan a los de un año normal. El tráfico corporativo y turístico de la zona es considerado uno de los catalizadores para que Calama retome rápidamente sus niveles normales de movimiento de pasajeros.
Fotografía portada – Ricardo J. Delpiano