Considerando la demanda en el transporte de carga y las necesidades de reemplazo de aeronaves más antiguas en los próximos años, Airbus considera el lanzamiento de una versión de carga del A350. La futura aeronave estaría orientada a ofrecer una gran capacidad de carga para rutas de larga distancia permitiendo a las líneas aéreas ampliar el negocio en este segmento o renovar equipos más antiguos y menos eficientes.
A fecha de hoy, la aeronave de carga de Airbus de mayor alcance es el A330F. Con una capacidad de transporte de hasta 70 toneladas en rutas de hasta 4.000 millas náuticas (mn) o 7.400 kilómetros (Km). A esta, se agrega el A330P2F que es una conversión de la versión de pasajeros a carguero con una capacidad de transporte de hasta 60 toneladas en rutas de 4.250 mn. o 7.550 Km. Sin embargo, no cuenta con un modelo para competir en igual condiciones con Boeing en el segmento de gran capacidad y larga distancia.
La oferta de Boeing para el mercado de carga está representada por cuatro modelos de aeronaves: B767-300F, B747-400F, B747-8F y B777F. A estos se agrega la versión B777-300ERSF que está llamada a reemplazar a los antiguos B747 entre otros equipos. Según datos del fabricante los distintos modelos y sus respectivas variantes pueden transportar entre 51,6 toneladas (B767-300BCF) y 133,2 toneladas (B747-8F) en rutas de hasta 4.970 mn o 9.204 Km (B777F, el carguero de mayor alcance).
Por lo anterior, Boeing es actualmente líder en el mercado de aeronaves de carga. Su posición está asegurada debido a la ausencia de competencia directa. Una situación que se manifiesta previamente en el segmento de carga media al menos hasta la puesta en servicio del A330F, aunque este último todavía no supera el liderazgo del B767-300F. La eventual propuesta de Airbus podría cambiar la situación en el corto-mediano plazo dependiendo de cuan atractivo sea producto final.
Por el desempeño que demuestra en el segmento de pasajeros, en Toulouse consideran que el A350 es adecuado para ofrecer al mercado una nueva aeronave de carga altamente eficiente en rutas de larga distancia. Sin ofrecer una excesiva capacidad, como la que dispone el B747-8F, por ejemplo, podría ser una alternativa más versátil que disminuya riesgos a los operadores ante los ciclos adversos.
Cabe recordar que hace una década, la demanda de aviones exclusivamente cargueros se reduce como consecuencia del aumento de la oferta en bellies (bodega en aviones de pasajeros) como resultado del crecimiento de aviones de pasajeros de gran capacidad. Hoy, el escenario parece revertirse principalmente por las perspectivas de crecimiento asociadas al comercio electrónico y una necesidad de reemplazo de aeronaves que tendría lugar en los próximos 15 a 20 años.
A lo anteriormente mencionado, se agrega la “comunalidad” con el resto de sus familias de aviones, aspecto que Airbus sabe potenciar y comercializar bien aprovechando la desventaja de su competidor más directos. Reacio a incorporarla en un principio en sus aviones, en los últimos años Boeing viene lentamente transitando hacia una mayor homogeneidad de sus productos, pero sin llegar aún a los niveles del fabricante europeo.
El futuro A350F -como se lo denominaría- estaría basado en el A350-1000 para transportar alrededor de 109 toneladas, una capacidad similar a la que posee el B777F. Por consiguiente, podría ser un reemplazo para aviones más antiguos como B747-400F, McDonnell Douglas MD11F que aún están en servicio o incluso más nuevos como los primeros B777F.
El fabricante europeo cuenta con el respaldo de su directorio para trabajar en el A350F. Las estimaciones indicarían que podría estar listo hacia 2025, lo que se traduce en una puesta en servicio para la segunda mitad de la presente década. Para determinar sus características y prestaciones finales, el programa incorporaría información y aprendizaje del desarrollo del BelugaXL (que está basado en el A330F), además de los datos que se disponen de la versión de pasajeros del A350.
Airbus ve en el futuro A350F “un avión prometedor” determinado por la necesidad de reemplazo de aeronaves cargueras que tendría lugar en los próximos años y el crecimiento del comercio electrónico. El auge de la carga aérea durante pandemia del COVID-19 es estacional que responde a las restricciones de viaje colocadas por los Gobiernos que reduce la capacidad de transporte de mercancías. Cabe recordar que la mayoría de la carga aérea viaja en las bodegas de aviones de pasajeros. A medida que la demanda de pasajeros regrese a los niveles normales y las líneas aéreas reactiven aviones, la oferta de bellies también volvería reduciendo la dependencia de cargueros.
Las proyecciones en Toulouse consideran que en los próximos 20 años se necesitarán más de 2.700 aviones cargueros. La mayoría de estos equipos estará concentrada en el segmento medio motivo por el cual consideran que todavía hay espacio para el A330F como para conversiones en rutas medias donde se inserta la variante A330P2F y el A321P2F.
El futuro estreno del A350F crearía una presión en Boeing para acelerar los planes para un B777X carguero. En esa nueva familia de aviones, sería el sucesor del actual B777F y probablemente esté basado en el B777-8.
Fotografía portada - Airbus