Con la promesa de mejorar de manera significativa eficiencia del consumo de combustible, Rolls Royce inicia la construcción del motor turbo fan más grande del mundo. El proyecto que busca estar listo hacia 2025 continúa con la planificación por parte de sus diseñadores para redefinir la industria de la aviación comercial.
Con el fin de los multimotores y la búsqueda de una sostenibilidad a un plazo cada vez más cercano, el fabricante trabaja en Derby, Reino Unido, en la primera unidad de la nueva gama de motores a reacción. Se denominan la familia UltraFan que busca mejorar en un 25% la eficiencia del consumo de combustible en comparación con la primera generación de motores Trent que se produce desde agosto de 1990.
El nuevo motor considera un fan de 3,55 metros de ancho (140 pulgadas) con el cual busca reducir costos por parte de los operadores a través de un by pass ratio de 15:1. Para ello, Rolls-Royce utilizará aspas en el fan de un compuesto de carbono en lugar de sus aspas huecas de titanio. En conjunto con la utilización de nuevos materiales, plantea un ahorro 340 kilos (750 libras) por motor.
En la industria aérea, los mayores fabricantes de motores a reacción para fuselaje ancho son General Electric, Rolls-Royce y Pratt & Whitney. Las tres compañías enfrentan el desafío de redefinir sus diseños para producir un turbofan capaz de entregar potencia suficiente con sólo dos motores en lugar de cuatro de menor tamaño. La intención es proporcionar soluciones para aportar en la continuidad de las compañías aéreas que cada día enfrentan mayores costos en una industria que apunta a todo lo contrario, precisamente con combustibles más eficientes, menos contaminantes y más rentables.
“Este es un momento emocionante para todos nosotros en Rolls-Royce. Nuestro primer motor de demostración, el UF001, se está construyendo y estoy deseando verlo construido y listo para las pruebas. Llega en un momento en el que el mundo busca formas cada vez más sostenibles de viajar en un mundo posterior a COVID-19, y nos enorgullece a mí y a todo nuestro equipo saber que formamos parte de la solución. Estoy encantado de que los gobiernos del Reino Unido y Alemania nos hayan apoyado para realizar estas importantes inversiones tecnológicas innovadoras”, asegura Chris Cholerton, presidente de Rolls-Royce.
Rolls Royce viene participando en distintos programas de financiamiento para avanzar en proyectos hacia futuro. Algunos se realizan en conjunto con el Instituto de Tecnología Aeroespacial de Innovación del Reino Unido, LuFo en Alemania y Clean Sky de la Unión Europea.
Los lineamientos del fabricante británico son los mismos que cualquier otro de la industria aérea: reducir los costos para propiciar herramientas que promuevan un transporte aéreo más democrático a través de viajes más económicos. El éxito de las compañías de bajo costo y tarifas bajas (LCC, por sus siglas en inglés) son una prueba de ese enfoque y una muestra de como la aviación puede ser más accesible a través de la innovación tecnológica y operaciones más sostenibles. En el caso de los motores, por ejemplo, clave son las nuevas plantas motrices que equipan a los Airbus A320neo, A330neo, A350 o Boeing 737 MAX o B787, por mencionar algunos ejemplos.
El turboreactor UltraFan presentado por Rolls Royce se perfila como una excelente alternativa para los operadores de larga distancia. Si bien todavía falta tiempo para ver un desarrollo completo, la intención busca ser una opción viable en el corto plazo a medida que aparecen nuevos modelos de aeronaves de mayor alcance.
3d portada – Rolls Royce