Tras una deliberación en los últimos días respecto al impacto que generan las restricciones, SKY determina suspender los vuelos internacionales desde y hacia Chile en cumplimiento con lo anunciado para el mes de abril. En la compañía, reconocen un impacto importante y esperan que la medida sea transitoria en los plazos definidos dado que afectan directamente a los pasajeros.
“Lamentamos y somos muy conscientes de las molestias que esta situación puede generar en nuestros pasajeros, por lo que estamos entregando todas las facilidades posibles para regularizar su situación de vuelo”, expresa Carmen Gloria Serrat, directora Comercial de SKY.
A diferencia de otras compañías aéreas chilenas, la situación de SKY es algo distinta dado que viene reduciendo servicios en lo que respecta a rutas y también frecuencias. La ruta Santiago – Lima es el tramo internacional más importante. De acuerdo con Serrat, las restricciones a los viajes y a la movilidad implementadas en otros país fuerza anticipadamente a reducir la oferta. “La compañía suspendió y redujo anticipadamente las frecuencias a sus destinos en Brasil, Argentina y el Caribe, manteniendo hoy solo algunos vuelos a Perú”, explica.
Según datos de la Junta Aeronáutica Civil (JAC), la ruta Santiago – Lima es la principal en el segmento internacional de la firma de bajo costo y tarifas bajas (LCC, por sus siglas en inglés). Entre enero y febrero, transporta 24.021 pasajeros entre ambas capitales. Más atrás se ubican los tramos Santiago – Río de Janeiro (GIG) y Santiago – Buenos Aires (EZE) con 7.560 y 7.258 pasajeros, respectivamente.
Mientras se mantenga vigente el cierre de fronteras decretado por las autoridades chilenas durante 30 días, SKY sólo dispondrá un número muy reducido de vuelos entre Santiago y Lima. El objetivo de estas frecuencias específicas es satisfacer las necesidades de retorno de aquellas personas que puedan regresar a su país de origen sin mayores inconvenientes.
Como en otras compañías aéreas, SKY señala que todos los pasajeros que tenían reservas internacionales para viajar durante el periodo en el que rige el cierre de fronteras tienen la opción de acogerse a la política de flexibilidad de la empresa. Entre las opciones disponibles están reprogramar la fecha de su vuelo sin costo alguno o bien solicitar la devolución mediante un voucher.
A nivel de industria, la flexibilidad es la herramienta más inmediata que tienen los usuarios enfrentar las afecciones que genera la compleja e improvisada situación producida por un factor totalmente ajeno a la industria aérea. Desde el inicio de la pandemia, las líneas aéreas vienen entregando múltiples facilidades que si bien tienen un horizonte temporal siguen extendiéndose en el tiempo.
Con la colocación del nuevo cierre de fronteras y las restricciones a la movilidad, las líneas aéreas en Chile señalan que respetan estrictamente los criterios y decisiones de la autoridad sanitaria. Sin embargo, piden que los anuncios se comuniquen con la mayor antelación posible.
Ante la extensión de las restricciones por más de un año, el sector aerocomercial pide al Gobierno de Chile una hoja de ruta, similar a lo que se está solicitando en el resto del mundo. El objetivo es poder reiniciar la actividad a la brevedad posible y con ello reactivar el empleo, así como los aportes económicos y sociales al país. Como muchos sectores de la población, también esperan que el proceso de vacunación que se lleva a cabo permita un mejoramiento de la situación sanitaria.
Fotografía portada – Simón Blaise