Por tercera vez, SKY se ve forzada a suspender una de las rutas que debe ser emblemáticas en la expansión de la compañía en la región. Debido a las restricciones de viaje impuestas unilateralmente por los Gobiernos, la línea aérea de bajo costo y tarifas bajas (LCC, por sus siglas en inglés) suspende su servicio Santiago – Bogotá.
A partir del 28 de marzo, SKY deja de operar la única ruta que posee Chile y Colombia. La esperanza es poder retomarlos en diciembre de este año bajo un escenario más auspicioso que permita disponer de una demanda suficiente para asegurar la rentabilidad de los vuelos.
Las restricciones impuestas por Chile, con la cuarentena obligatoria a los viajeros a la llegada, aparece como la principal causa en la suspensión dado que Colombia mantiene sin cambio sus políticas, salvo la exigencia de pruebas PCR a los viajeros. A esto se suma el término de la temporada de vacaciones y prácticamente la ausencia de pasajeros viajando por motivos de trabajo que reduce las posibilidades de asegurar un tráfico rentable.
“Producto de las restricciones implementadas para combatir la pandemia, sumado a que la ruta Santiago – Bogotá es de carácter estacional, se decidió suspender los vuelos desde el 28 de marzo del 2021. Esperamos poder reactivar esta ruta en diciembre, para poder seguir conectando pasajeros entre ambos destinos”, comenta Carmen Gloria Serrat, directora Comercial de SKY. “Es importante destacar que todos los pasajeros afectados, serán compensados como corresponde de acuerdo con nuestras políticas de flexibilidad”.
Bogotá es uno de los destinos más significativos en esta nueva etapa de expansión de SKY, pero que se ha visto opacada por la pandemia. Inicialmente, la ruta se planifica para junio de 2020 lo que no es posible de materializar debido a los cierres de fronteras de Colombia y Chile. Posteriormente, la compañía intenta un segundo lanzamiento en noviembre que termina posponiendo para el 02 de enero de 2021.
En la ruta Santiago – Bogotá, SKY comienza ofreciendo una frecuencia de tres vuelos por semana con un total de 1.116 asientos disponibles (semanales) en ambos sentidos. De acuerdo con el sistema de reservas, actualmente sólo ofrece dos vuelos semanales para el resto de marzo. En el primer mes de operación, la compañía transporta en la ruta 2.368 pasajeros, distribuidos en 1.286 viajeros saliendo de Chile y 1.082 personas ingresando al país, según datos de la Junta Aeronáutica Civil (JAC).
Debido al creciente tráfico de pasajeros principalmente del tipo V.F.R. (Visit Friends & Relatives), étnico y turísticos, los que son más sensibles a las políticas de estimulación de la demanda, SKY espera un alto volumen de pasajeros. Por lo mismo, diseña una operación Santiago – Bogotá de manera permanente (a lo largo del año). Prueba de ello, es la planificación inicial para junio y posteriormente y un segundo intento para abrir la ruta noviembre. El creciente intercambio de viajeros y de comercio debieran asegurar un éxito de la operación. Sin embargo, ante la realidad actual, la compañía precisa que el servicio es ahora estacional.
Con la salida temporal de SKY, el tráfico aéreo entre Chile y Colombia queda reducido a tres compañías y cuatro rutas sin escalas en dos ciudades. Avianca, LATAM y JetSMART son los operadores en el tramo Santiago – Bogotá. Las rutas Santiago – Cali, Antofagasta – Bogotá y Antofagasta – Cali, son únicamente operadas por JetSMART. Las tres líneas aéreas mencionadas se encuentran operando con un bajo número de frecuencias en comparación con los niveles 2019 o lo inicialmente planificado.
Debido a la mantención de las restricciones de viaje y la imposición de otras nuevas por parte de los Gobiernos, el tráfico internacional continúa seriamente afectado y no se descarta que las medidas puedan forzar a nuevos ajustes de capacidad, todo bajo un escenario altamente volátil. Como ejemplo de lo anterior, está la nueva disposición que establece el Chile de trasladar obligatoriamente a todos los viajeros provenientes de Brasil a residencias sanitarias para la toma de nuevos exámenes PCR (adicional al requisito de ingreso) más un confinamiento obligatorio, primero en el alojamiento dispuesto por el Estado y en caso de resultar negativo, en el lugar definido por el pasajero.
Se advierte que la nueva restricción tenga un impacto negativo en la demanda de viajes con Brasil, una de las más importantes en rutas internacionales de Chile. Como consecuencia, se prevé una nueva demora a la reactivación del sector aéreo chileno y de otras industrias asociadas como el turismo, seriamente afectadas por las medidas gubernamentales cambiantes que impiden una planificación. No se descarta que las líneas aéreas puedan reducir servicios.
A fecha de hoy, SKY opera vuelos desde Santiago a Florianópolis y Río de Janeiro (GIG). Consultada la compañía, indica que por el momento no hay una decisión tomada respecto a esas operaciones.
Fotografía portada - Alfredo Vera