Tras no llegar a acuerdo con los sindicatos Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA) y Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA), respectivamente, Grupo Aeroméxico solicita a las autoridades de México suspender los contratos colectivos de trabajo para poder hacer frente a los efectos adversos que está provocando la crisis del COVID-19 y las restricciones unilaterales impuestas por los Gobiernos. La medida es rechazada por los gremios que desconocen los términos planteados por la línea aérea, reiterando los esfuerzos previamente realizados para cooperar con la empresa como la rebaja de salarios.
Según Grupo Aeroméxico, la medida también se ajusta para cumplir con los compromisos y objetivos contractualmente requeridos en el proceso de reestructuración bajo el Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de los Estados Unidos dentro del financiamiento DIP (Debtor in Possesion) y cumplir con las condiciones necesarias para tener acceso al siguiente desembolso del Tramo 2. Estos recursos son necesarios para preservar el negocio, las fuentes de empleo y evitar incumplimientos generalizados con las obligaciones de la línea aérea con sus respectivos acreedores.
Recientemente, Aeroméxico logra obtener una extensión del plazo previsto del contrato de crédito para poder cumplir con las condiciones y obligaciones del financiamiento DIP. De esta manera, espera mayor tiempo para negociar con los gremios. El nuevo plazo vence el 27 de enero de 2021.
“La grave situación de la pandemia y la consecuente continuación de las restricciones derivadas de la declaratoria de fuerza mayor emitida por las autoridades gubernamentales, en México y en el extranjero, siguen reduciendo la demanda de vuelos y mermando las finanzas de la compañía”, señala Grupo Aeroméxico.
La línea aérea indica que la petición de terminar con los contratos colectivos se trata de un hecho de fuerza mayor y reitera que es para asegurar la continuidad de las operaciones. También se solicita el término de las relaciones contractuales individuales con un determinado grupo de pilotos y tripulantes de cabina, ambos como reflejo de la nueva realidad de la compañía.
Pese a que México es uno de los países que encabeza la reactivación de la industria aérea en América Latina, la imposición de restricciones unilaterales por parte de los Gobiernos está desacelerando la reactivación. La vuelta a un escenario similar a los primeros meses de la pandemia tiene impacto aún mayor en una industria muy afectada por las medidas y que está amenazada por la falta de liquidez. A esto se agrega la ausencia de medidas de ayudas económicas por parte de los Gobiernos de la región.
Aeroméxico dice que el término de los contratos de trabajo con ASPA y ASSA han sido debidamente presentados a las autoridades laborales competentes en pleno cumplimiento a las disposiciones aplicables a la Ley Federal de Trabajo de México.
ASPA dice que no ha sido notificada por la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje de ningún procedimiento legal. En ese sentido, desconocen las peticiones y términos planteados por Aeroméxico. “No existe motivo legal ni económico para de dar por terminado el contrato colectivo de trabajo, ni las relaciones laborales de los pilotos”, declaran.
El gremio que agrupa a la mayoría de los pilotos en México señala que han aportado ayudas importantes a la empresa durante los últimos meses. Como ejemplo, señalan la reducción de ingresos de los pilotos en un 50% con repercusiones de hasta 65% durante los meses de abril, mayo y junio, del 37,5% durante julio, agosto y septiembre, y del 30,0% durante los meses de octubre, noviembre y diciembre.
Aeroméxico señala que está en la mejor disposición para continuar las conversaciones con ASPA y ASSA dentro del plazo señalado para encontrar esquemas que cumplan con las condiciones necesarias para acceder a los recursos disponibles. La empresa agradece el apoyo de los trabajadores y también de las autoridades regulatorias en este proceso. Por su parte, ASPA también aclara su completa disponibilidad para asegurar un acuerdo que no ponga en riesgo la viabilidad de la empresa.
En relación con el proceso de reestructuración bajo Capítulo 11, Grupo Aeroméxico indican que siguen llevando a cabo de una manera ordenada la reestructuración de sus pasivos financieros mientras continúa volando. Asimismo, asegura que seguirá utilizando todos los instrumentos disponibles para evitar pasar de una situación de reestructuración financiera a una situación de liquidación, con la consecuente pérdida de la fuente de empleo afectando miles de empleos directos e indirectos.
A nivel general, la industria de la aviación critica las decisiones de los Gobiernos de América Latina y el Caribe de imponer medidas restrictivas que son contradictorias y no aportan a la reactivación del transporte aéreo y el turismo, sectores que son catalizadores de desarrollo económico y de empleo. Las consecuencias que tienen las medidas son significativas porque crean desincentivo a los viajes y, con esto, ausencia de ingresos lo que afecta a las finanzas y los empleos.
Fotografía portada – Aeroméxico