En una medida política de carácter preventivo, el Ministerio de Salud decreta que a partir del jueves 10 de diciembre, toda la Región Metropolitana de Santiago retrocederá a Fase 2 del programa de desconfinamiento del programa “Paso a Paso” definido por el Gobierno de Chile. La autoridad sanitaria justifica la medida por un aumento de 18% de nuevos casos de COVID-19 en la capital y sus alrededores.
La Fase 2 denominada “Transición” permite de lunes a viernes salir sin la necesidad de permisos, las reuniones sociales privadas están permitidas hasta 10 personas en lugares cerrados y 20 en lugares abiertos, funcionamiento de establecimiento educacionales abiertos y funcionamiento de los restaurantes sólo en lugares abiertos. Los fines de semana aplica una cuarentena.
Respecto a los traslados, el retroceso no permite viajes interregionales, salvo aquellos que se consideren como esenciales, es decir por trabajo esencial, salud o asistencia a funerales de familiares cercanos. El programa definido por el Gobierno sólo permite viajes interregionales a partir de comunas en Fase 3 en adelante. Las fronteras continuarán abiertas de acuerdo con la normativa vigente desde el 23 de noviembre.
La medida representa un duro impacto para la gradual reactivación de la demanda que necesitan las líneas aéreas, los aeropuertos y la industria del turismo en Chile. El sector aéreo y del turismo tenía confianza en la temporada de Fiestas de fin de año y la temporada de verano para generar un mínimo de ingresos que le permitan compensar las millonarias pérdidas que están afectas como consecuencias de las restricciones unilaterales impuestas por el Gobierno de Chile, especialmente ante la ausencia de ayudas económicas significativas.
Santiago es el mayor centro económico y demográfico de Chile. Por consiguiente, el retroceso de la Región Metropolitana afecta al principal mercado emisor de viajes del país tanto a nivel doméstico como internacional.
Con la suspensión de los viajes interregionales (dentro de Chile) se advierte una nueva ola de cancelaciones y reprogramaciones de vuelos por parte de la población, especialmente si los viajes no son por motivos laborales. Dicho escenario es complejo tomando en cuenta la situación financiera y la falta de liquidez en la industria de la aviación.
Una de las consecuencias más inmediatas está directamente relacionada con el tráfico aéreo de pasajeros y movimiento de aeronaves previsto para el eclipse de sol del próximo 14 de diciembre dado que no está permitido viajar entre comunas que se encuentren en Fase 2 o en cuarentena. Inicialmente, se había estimado un movimiento de alrededor de 400 aeronaves que tenían como destino las ciudades-balnearios de Pucón y Villarrica. La medida complica programas turísticos y acciones comerciales que estaban realizando algunos operadores aéreos. Hasta el momento, las líneas aéreas no informan cancelaciones de frecuencias o una revisión de la capacidad.
El Gobierno de Chile defiende su decisión y dice que es una medida preventiva para reducir la probabilidad de aumento significativo de contagios en los días más inmediatos con el objetivo de reducir un impacto mayor de una “segunda ola de contagios”. En declaraciones de prensa, las autoridades señalan que esperan poder levantar algunas restricciones u otorgar fases de mayor confinamiento hacia las Fiestas de fin año, pero sin entregar mayores pronósticos.
Con el retroceso inesperado e inmediato de la Fase 2 de la Región Metropolitana más los temores de una “segunda ola de contagios”, se impone un escenario altamente volátil que dificulta las perspectivas de reactivación y retrasa el escenario de recuperación. Si bien las medidas sanitarias pueden levantarse en las semanas siguientes dependiendo de las condiciones sanitarias, la planificación de los viajes no esenciales se dificulta de manera significativa y se vuelve mucho más inmediata. El sector más afectado es el más sensible al precio.
Al 07 de diciembre, Chile posee 9.862 casos activos de COVID-19 de un total 562.142 personas contagiadas de las cuales 563.267 se consideran como recuperadas. De acuerdo con el último informe epidemiológico publicado por la autoridad, la Región Metropolitana registra 2.836 contagios de COVID-19, con una tasa de incidencia actual de 34,9.
Fotografía portada – Simón Blaise