Tras el término de las restricciones para viajes domésticos en la mayoría de las comunas del país, la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) pone sus esperanzas en una próxima apertura de las fronteras chilenas lo que permitirá la recuperación gradual de los vuelos internacionales. Con protocolos sanitarios establecidos, los estudios científicos que demuestran que la aviación no es un mecanismo de contagio y el llamado a los Gobiernos del mundo a considerar las pruebas PCR para COVID-19 como un requisito estandarizado para ingresar a los países, no se justifican otro tipo de medidas.
“Hemos hecho un llamado a las autoridades chilenas para que consideren la reapertura de los vuelos internacionales para que los extranjeros puedan ingresar al país. Al momento, hay algunos vuelos internacionales desde Europa y los Estados Unidos, pero sólo pueden entrar a Chile ciudadanos chilenos o extranjeros residentes en el país”, señala Peter Cerdá, vicepresidente para las Américas y el Caribe de IATA.
En su balance del panorama de la región, IATA destaca los avances significativos que los países de América Latina están dando al abrir las fronteras permitiendo que lentamente se comience a recuperar la conectividad aérea en la región. Mencionan las decisiones de países centroamericanos, así también los casos de Colombia y el Perú que, desde el 21 de septiembre y el 05 de octubre, tienen sus fronteras abiertas. En el otro lado, ponen los casos de Argentina y Venezuela como los más desafiantes dado que son los dos países que no poseen ni vuelos domésticos ni vuelos internacionales.
De acuerdo con el mapa desarrollado por IATA para consultar los requisitos de ingresos a cada país del mundo, Chile aparece junto con Argentina y Venezuela como los que tiene mayores restricciones de ingresos. Lo anterior, por la extensión injustificada del cierre de las fronteras y la mantención de las cuarentenas obligatorias para toda persona que ingrese al país.
Si bien desde septiembre se ofrece la alternativa de realizar examen PCR para todos aquellos que tengan razones que hagan incompatible con la cuarentena, muchos viajeros reclaman la falta de información para acceder a ese beneficio, aún con prueba negativa para COVID-19 realizada antes de ingresar. Como ciudadanos muchos se sienten discriminados y “pasados a llevar” por el Estado que con burocracia los relegan a ciudadanos de segunda categoría, poniendo en comparación con el libre ingreso y salidas de equipos de fútbol para disputar partidos dentro y fuera del país.
Desde IATA, solicitan que se eliminen las restricciones de cuarentenas obligatorias porque no se justifican tomando en cuenta que, a más de siete meses de pandemia COVID-19 en el mundo, existe más información de los organismos internacionales de salud acerca del comportamiento del virus. Con la masificación de las pruebas PCR, expresan que este sea el requisito estandarizado para garantizar que todo quien llegue desde otro país lo haga en condiciones óptimas de salud.
“Se está pidiendo que se elimine esa restricción dado que existen los protocolos de bioseguridad y se está impulsando las pruebas PCR, por lo que hay sistemas para ayudar a la reactivación garantizando aún más que el transporte aéreo es un medio seguro”, agrega Cerdá.
Recientemente, un estudio médico de la Universidad de Harvard reafirma que la aviación no es un mecanismo de contagio. De acuerdo con las conclusiones obtenidas, aseguran que la probabilidad de contagiarse por COVID-19 en un avión es de menos del 1% por la acción que los filtros HEPA (High Efficiency Particulate Air) que tienen todos los aviones y la obligatoriedad del uso de mascarillas en vuelo.
El Centro para el Control y la Prevención de las Enfermedades de los Estados Unidos (CDC) investiga 1.600 casos de personas que volaron en riesgo de propagar el COVID-19 y identifican a casi 11.000 personas expuestas al virus, pero no han podido confirmar un caso de transmisión en un avión, según consigna el Washington Post (19/09/2020). Lo anterior, es independiente a la posibilidad de que algunos de esos viajeros hayan enfermado posteriormente y cuyas causas no están relacionadas con el viaje en sí.
Desde la industria aérea argumentan que Chile está listo para abrir sus fronteras internacionales dado que está permitiendo viajes dentro del país y están los protocolos sanitarios. “Estamos recibiendo noticias no oficiales que está cerca de la reapertura, pero es muy importante que el Gobierno salga pronto con un decreto que oficialice toda la información”, sostiene el vicepresidente de IATA para las Américas.
El 22 de septiembre, el ministro de Economía, Fomento y Turismo, Lucas Palacios, menciona que “se está evaluando” cómo abrir las fronteras para los extranjeros, pero no entrega fechas ni plazos estimados. Sólo menciona que están evaluando medidas aplicadas en Estados Unidos, Europa y otros países, tampoco sin precisar cuales. “Todavía no hay ninguna decisión tomada al respecto, pero si ya se están evaluando ciertas medidas que se han aplicado en Europa, Estados Unidos y otros países de tal manera que nosotros podamos anticiparnos también de cara hacia el futuro”, dice en un programa de Tele13 Radio.
Sin embargo, las declaraciones pierden efectividad con la nueva prórroga de cierre de fronteras decretada por el Gobierno de Chile por otros 15 días a partir del 26 de septiembre. La medida sigue revisándose cada quincena lo que aumenta la incertidumbre y retrasa la recuperación de la industria aérea y de las actividades que dependen de ella.
Por la necesidad de generar liquidez y recuperar la actividad, algunas líneas aéreas están reanudando con altos costos los vuelos internacionales aprovechando la apertura de los países. Sin embargo, trasladan hacia Chile sólo a pasajeros chilenos o extranjeros con residencia en el país.
Hasta septiembre, la conectividad internacional está representada por LATAM con vuelos desde Santiago a Los Ángeles, Miami, Nueva York (JFK), Madrid, Montevideo y Sao Paulo (GRU); American Airlines en la ruta Miami – Santiago, Air France operando París (CDG) – Santiago, KLM conectando Ámsterdam – Santiago, Iberia desde Madrid y Amaszonas enlazando las ciudades de La Paz e Iquique.
Para octubre, LATAM recupera la conectividad desde Santiago a Bogotá, Guayaquil y Santa Cruz de la Sierra. Avianca también anuncia vuelos entre Bogotá y Santiago a partir del día 15. JetSMART retoma hoy 02 de octubre la ruta Santiago – Cali, mientras que la próxima semana agrega también tramos desde la capital chilena hacia Bogotá, Lima, Arequipa y Trujillo. Por su parte SKY, también recupera los servicios entre Santiago y Lima, así como a Sao Paulo (GRU) y Río de Janeiro (GIG).
Dependiendo de a apertura de las fronteras por parte de Argentina, también está la posibilidad de la reanudación de las rutas hacia y desde Buenos Aires, por parte de Aerolíneas Argentinas y JetSMART. Desde los Norteamérica está el eventual retorno de Air Canada y el aumento a diario de las frecuencias de American Airlines desde Miami, ambas por confirmar.
Con la mayoría de los países de la región abriendo sus fronteras y adoptando protocolos estandarizados, una mayor cantidad de líneas aéreas reactivando sus servicios, las múltiples necesidades de viaje de miles de personas afectadas por el cierre de las fronteras, el Gobierno de Chile enfrenta una mayor presión y un escenario que, en términos de apertura, lo pone en una especie de aislamiento del resto de los países que, tal como muestra el mapa de restricciones de IATA, comparable con Argentina y Venezuela.
Fotografía portada – Simón Blaise