Con un vuelo semanal de carácter regular, Paraguay y Uruguay ponen en práctica la primera “burbuja de viajes” en la región. La operación se da como resultado de un trabajo conjunto entre las autoridades de ambos países como parte de los esfuerzos para recomponer los viajes aéreos internacionales, retomar la conectividad e impulsar la economía.
La “burbuja de viajes” entre los dos países es aprobada en la segunda quincena de agosto, pero en los últimos días se oficializa la operación. De esta manera, Amaszonas Uruguay es la primera compañía en retomar las operaciones con equipos Embraer E190. Los vuelos están programados inicialmente para los lunes y se espera que aumenten de manera gradual en los próximos meses.
Hasta antes de la crisis del COVID-19, Amaszonas y Paranair son las líneas aéreas que operan entre Paraguay y Uruguay, conectando Asunción con Montevideo y Punta del Este. No se descarta que esta última también retome los vuelos entre los dos países.
De acuerdo con la normativa de los dos países, todos los pasajeros deben someterse a pruebas PCR para COVID-19 realizada 72 horas antes del embarque en el punto de origen y contar con un seguro médico internacional que incluya la cobertura y tratamiento intensivo en caso de desarrollar la enfermedad en destino. Pese al restablecimiento de los vuelos internacionales entre los dos países, se mantiene el requisito de cuarentena por siete días para todos los viajeros, siendo uno de los puntos criticados por la industria aérea.
Las “burbujas de viajes” son corredores entre dos puntos (ciudades, regiones o países) con un mismo nivel sanitario en relación con la evolución de la pandemia. A través de medidas de confianza mutua, las autoridades establecen controles preventivos armonizados y validados por su contraparte, los que permiten avanzar gradualmente hacia la normalidad.
La primera aplicación del concepto nace en Oceanía cuando Qantas utiliza este término al momento de estudiar la reanudación de vuelos en tramos específicos como hacia Nueva Zelanda o Fiji. Posteriormente, JAL y Malaysia Airlines sugieren que al establecer su acuerdo de negocio conjunto (JBA, por sus siglas en inglés) sus respectivos Gobiernos pueden avanzar en el establecimiento de protocolos conjuntos que deriven en una “burbuja de viaje”.
En una región marcada por medidas draconianas de confinamiento y cierre de fronteras que se extienden por siete meses, la aplicación de “burbujas de viajes” se considera como un paso significativo para el restablecimiento de vuelos internacionales. Algunos sectores en la industria consideran que este tipo de prácticas pueden ser viables para aplicar en otros países, sin embargo, las diferentes condiciones sanitarias que todavía se manifiestan y la falta de claridad que entregan las autoridades pueden dificultar su establecimiento.
Uruguay destaca a nivel mundial por su destacada estrategia para combatir la pandemia del COVID-19. Entre los factores que explican el éxito del país es una unidad nacional entre todos los sectores políticos, decisiones de salud tomadas bajo criterios científicos, alta capacidad de trazabilidad en las primeras semanas de la pandemia y un sistema de salud calificado como un derecho social y no como un bien de consumo, facilitando que la población se acerque a los servicios “sin dudar” o “según lo permitan sus condiciones económicas”.
Fotografía portada - Carrasco Airport