Con el fin de incentivar la demanda y recuperar la confianza de los viajeros, American Airlines, Delta y United deciden eliminar los cobros adicionales por cambios de pasajes de manera permanente. Se trata de un escenario nuevo para las principales líneas aéreas de los Estados Unidos, acción que dependiendo de su vigencia en el tiempo puede marcar un punto de inflexión.
La medida busca tener un efecto de estimulación de la demanda al reducir el precio final de los pasajes. Dependiendo de la línea aérea, aplica para los vuelos domésticos y también para algunas rutas internacionales. Si bien se proyecta un impacto en los ingresos adicionales, las compañías aéreas consideran que es paso absolutamente necesario para salir en busca de una demanda que hoy no está presente.
United Airlines es la primera línea aérea que adopta este tipo de medida el pasado domingo. Con el fin de no quedar atrás en la competencia, la acción es seguida por American Airlines y Delta, casi en forma inmediata. Así, en menos de tres días las principales compañías estadounidenses realizan un giro completo en sus políticas.
“Hemos dicho antes que necesitamos enfocar la flexibilidad de manera diferente a como lo ha hecho esta industria en el pasado”, dice Ed Bastian, CEO de Delta. “Queremos que nuestros clientes reserven y viajen con tranquilidad, sabiendo que seguiremos evaluando nuestras políticas para mantener el alto nivel de flexibilidad que esperan”.
Como consecuencia del escenario volátil para viajar y la dificultad para proyectar una recuperación, American, Delta y United estaban otorgando más flexibilidad a sus pasajeros para cambiar las fechas de los pasajes. La mayoría de las políticas de flexibilidad sin penalización tenían como límite hasta fin de año.
De acuerdo con el Departamento de Transporte de los Estados Unidos (DOT), la industria aérea en ese país genera más de US$2,8 mil millones de ingresos por concepto de cargos adicionales por cambios en 2019. La mayor cifra se obtiene en 2015 cuando la industria recauda US$3 mil millones. Por consiguiente, se trata de un ingreso adicional importante y su cancelación marca un punto de inflexión dependiendo de su extensión en el tiempo.
El fin de los cobros por cambios aplica para todos los asientos comercializados en First, Business Class, Premium Economy y Economy. También consideran distintas clases tarifarias, a excepción de las tarifas más económicas (Basic Economy). Como se menciona, la política rige para vuelos domésticos en los Estados Unidos, Canadá, Puerto Rico, las Islas Vírgenes y México.
“El mundo está en constante cambio. American está comprometida en cuidar a nuestros clientes en todos los aspectos de su viaje”, comenta Vasu Raja, director de Ingresos de American. Agrega que la decisión de eliminar los cobros permitirá a los pasajeros tener más flexibilidad para acceder a vuelos y upgrades de asientos en distintas clases tarifarias.
United es la primera de las tres principales compañías aéreas de los Estados Unidos en anunciar la eliminación de cobros adicionales para todos los boletos emitidos después del 03 de marzo. Ahora, extiende esa política para nuevos pasajes hasta el 31 de diciembre de 2020. Ante la nueva realidad que impone la crisis, sus ejecutivos indican que los cambios en el negocio son inevitables para atender de manera efectiva las necesidades de los clientes.
“Lo que más importa es a forma en que respondemos”, sentencia Scott Kirby, CEO de United. “Después de anteriores tiempos difíciles, las líneas aéreas tomaron decisiones para sobrevivir, a veces a expensas del cliente. United Airlines no seguirá esa jugada cuando salgamos de esta crisis. Estamos adoptando un enfoque completamente diferente y buscando nuevas formas para servir mejor a nuestros clientes”.
La decisión de American, Delta y United puede generar una mayor presión competitiva en el mercado aéreo de los Estados Unidos. Hasta la fecha, la texana Southwest se caracteriza por su exención de cobros como parte de su política de marketing. Con una mayor cantidad de operadores replicando la medida, se espera que la acción también comience a ser aplicada en otras líneas aéreas, ya sea para no quedar atrás frente a la competencia o bien para alinear políticas de viaje con sus respectivos socios comerciales a fin de mantener un estándar de servicio.
El término de los cobros por cambios de pasajes busca incentivar a la demanda a corto plazo e incrementar los ingresos y liquidez de las compañías aéreas de cara al término de las ayudas económicas que amenaza con la pérdida de miles de empleos. Prácticamente todas las líneas aéreas estadounidenses están considerando desvinculaciones masivas a partir del 1º de octubre de no existir nuevos mecanismos de ayuda como una Ley CARES 2.0. (Coronavirus Aids Relief Economic and Security Act). Aproximadamente, 75.000 empleos están en riesgo.
Fotografía portada - Alfredo Vera