Tras reiniciar hoy los vuelos domésticos, Colombia prepara el siguiente paso en la recuperación de la conectividad aérea con la recuperación de sus vuelos internacionales. Según declaraciones del Presidente Iván Duque realizadas el domingo 30 de agosto, el país podría autorizar las primeras operaciones bajo un formato similar de “vuelos pilotos” realizados en las semanas anteriores en rutas domésticas.
“Vamos a empezar a restablecer los vuelos internacionales”, dice el Mandatario. “Obviamente no será con el dinamismo a plenitud como lo teníamos antes de la pandemia. Estamos identificando ya esas rutas”.
Los “vuelos pilotos internacionales” consideran cinco rutas internacionales desde Colombia hacia Chile, Ecuador, los Estados Unidos, Panamá y el Perú. Sin embargo, diario El Tiempo (31/08/2020) indica que los vuelos con el Perú podrían ocurrir en diciembre, demora que podría estar asociada a la incertidumbre entregada por las autoridades de ese país respecto al reinicio de la actividad.
Por las operaciones realizadas hasta antes de marzo, la mayoría de las rutas internacionales están directamente relacionadas con Bogotá, aunque en casos específicos también podrían incluir otras ciudades colombianas tras recibir solicitudes de ciudades como Barranquilla, Cartagena, Medellín y Pereira que tienen enlaces internacionales con los Estados Unidos y Panamá, principalmente.
Según declaraciones del ministro de Salud, “es poco probable que los vuelos incrementen más la transmisión y la progresiva apertura que permite la nueva emergencia, no persisten las condiciones para mantener vuelos cerrados desde y hacia las grandes capitales del país”. La autoridad agrega que se está trabajando en los protocolos sanitarios que se exigirán en los viajes internacionales.
Siguiendo la experiencia de otros países como Ecuador, Egipto o Francia, por mencionar algunos, Colombia planea que uno de los requisitos que se exigirá a los viajeros será una prueba negativa de PCR para COVID-19 para todo aquel que ingresa al territorio colombiano. Como medidas para generar confianza entre la población y las propias autoridades ante las diferencias y contradicciones que muestran algunos Gobiernos, esta exigencia cobra fuerza en América Latina y el mundo para reactivar gradualmente la conectividad entre los países.
Ángela María Orozco, ministra de Transporte de Colombia, indica que el país está realizando una especie de “diplomacia sanitaria” con otros Estados para realizar un catastro de la situación en la región con el objetivo de dar curso a la fase inicial de conectividad. La acción política sigue los lineamientos aplicados en las semanas previas a la activación regular de los vuelos nacionales. En ese sentido, anticipa que reinicio de los vuelos internacionales será gradual como los vuelos domésticos.
Por las diferencias que existen en cada país tanto en el nivel de contagios por COVID-19 como en políticas de los Gobiernos, la diplomacia es fundamental para recuperar los vuelos internacionales. Mientras en los Estados Unidos no existen restricciones para el ingreso de viajeros internacionales, en Ecuador se exige pruebas PCR negativas para COVID-19 y Chile mantiene sus fronteras cerradas para extranjeros y abiertas para ciudadanos chilenos o residentes en el país, pero con la obligación de realizar cuarentenas. Según distintas fuentes, las acciones diplomáticas de Colombia también consideran conversaciones con otros países, además de los mencionados, como Brasil, Costa Rica, República Dominicana y Turquía, entre otros.
Una vez que se tengan los acuerdos con la contraparte, Colombia trabajará en conjunto con Aeronáutica Civil (Aerocivil) para definir el cronograma, el cual podría estar finalizado en el transcurso de esta semana. De no existir retrasos en los tiempos, se estima que los primeros vuelos internacionales desde y hacia Colombia podrían darse a partir de la tercera semana de septiembre.
Hoy, Colombia comienza con sus vuelos domésticos en las 15 rutas autorizadas por Aerocivil. La primera etapa de reactivación considera una operación aérea al 12% de la capacidad, medida en asientos disponibles por kilómetro (ASK), respecto a los niveles de 2019. Como en otros mercados, el reinicio de la actividad está marcado por políticas de estimulación de la demanda por parte de todas las líneas aéreas.
Fotografía portada – Benjamín Concha