Pese al retorno de SKY al mercado aéreo doméstico, el tráfico aéreo de pasajeros en Chile mantiene una caída significativa en junio. Según datos de la Junta Aeronáutica Civil (JAC), se movilizan 125.205 pasajeros en vuelos nacionales e internacionales lo que representa una caída de 93,4% en comparación con igual mes del año anterior. En el primer semestre 2020, el tráfico aéreo de pasajeros acumula una caída de 47,7% con 6.904.034 pasajeros transportados en vuelos domésticos como internacionales.
De acuerdo con la JAC, en junio se aprecia un descenso no significativo de los viajes aéreos en el país (principalmente domésticos) de 0,4%. Dicho estancamiento con una baja hacia la última semana refleja que las restricciones impuestas unilateralmente por el Gobierno mantienen condicionado cualquier recuperación del sector, aún cuando existen los controles sanitarios correspondientes en los distintos aeropuertos y aeródromos del país dispuestos por el Ministerio de Salud.
En junio, SKY recupera parte de sus operaciones a un número reducido de destinos (seis en total, además de Santiago) con frecuencias limitadas. Pese a ser una compañía que funciona con estímulo a la demanda, su regreso no está acompañado de un rol importante por tener voluntariamente una oferta limitada por vuelo (por bloqueo del asiento central) que reduce sus posibilidades de aumentar la cantidad de pasajeros transportados. La medida es contraria a las prácticas recomendadas por la industria aérea por crear confusión en los usuarios, dar falsa sensación de seguridad y condicionar cualquier oportunidad de incrementar ingresos en un periodo clave para la recuperación.
Vuelos internacionales
Los vuelos internacionales desde y hacia Chile se mantienen limitados en junio con un movimiento de 13.901 pasajeros lo que representa una caída de 98,5% en comparación con junio del año anterior. En el primer semestre, se transportan 2.576.062 pasajeros en rutas internacionales exhibiendo una caída del 55,2% en comparación a igual periodo del año anterior.
Los vuelos internacionales que se realizan en junio continúan siendo en su mayoría de repatriación, a excepción de las rutas Santiago – Miami por parte de LATAM Airlines y Madrid – Santiago por parte de Iberia, convirtiéndose en la primera compañía europea en reanudar servicios con Chile. Cabe recordar que pese al cierre de fronteras decretados por Chile para ciudadanos extranjeros, las personas con nacionalidad chilena o residentes en el país, así como extranjeros en el territorio pueden salir sin problemas dependiendo de las condiciones de ingresos en el país o ciudad de destino. En el caso de Estados Unidos, no hay restricciones de entrada. Para los países de la Unión Europea, sólo pueden ingresar ciudadanos o residentes en esos países.
Vuelos domésticos
Según la JAC, en junio se movilizan 112.114 pasajeros en vuelos domésticos lo que representa una caída de 89,1%. En los primeros seis meses, se transportan 4.387.972 pasajeros dentro de Chile con un descenso de 42,0% respecto al mismo periodo del año anterior.
En junio, SKY retoma sus operaciones en el mercado doméstico chileno. Por consiguiente, los tres principales operadores aéreos de Chile recuperan sus servicios. No obstante, el mercado aéreo chileno ya registra la salida de una línea aérea: ONE Airlines.
Por participación de líneas aéreas, LATAM registra una cuota de 45,7% seguida por JetSMART con 28,4% y más atrás por SKY con 23,6%. En el último puesto, se ubica Aerovías DAP con una participación 2,3%. Las cuotas de mercado continúan estando distorsionadas por los ajustes de capacidad de las líneas aéreas como consecuencia de las restricciones de viaje y también la situación particular de cada una de ellas.
Carga aérea
La carga aérea mantiene también una caída importante en junio, pese a la mayor demanda por estos servicios. El descenso significativo en la oferta como consecuencia de la paralización de los vuelos de pasajeros en rutas internacionales, principalmente, afecta el movimiento de mercancías por avión. Cabe recordar que la mayoría del transporte de carga se realiza en los bellies de los aviones de pasajeros.
De acuerdo con los datos oficiales, en junio se transportan 28.138 toneladas de carga en vuelos nacionales e internacionales lo que en comparación con igual mes del año anterior representa una baja de 12,7%. En el primer semestre, se movilizan 181.512 toneladas en vuelos domésticos e internacionales con una caída de 9,9% en comparación con el mismo periodo 2019.
En el sexto mes, la carga doméstica es la que registra una mayor baja con un descenso significativo de 43,0% para 1.711 toneladas, mientras que la carga internacional cae un 9,6% con 26.426 toneladas transportadas, ambas en comparación con igual mes del año anterior. Algo similar ocurre en términos acumulados, con un descenso de 14,9% para 13.930 toneladas transportadas en rutas domésticas, frente a una caída de 9,4% para 167.583 toneladas en rutas internacionales.
Las restricciones de viaje a nivel doméstico como internacional son actualmente la principal limitante para una recuperación del transporte aéreo. Si bien Chile es uno de los tres países de la región que no suspende vuelos domésticos, las restricciones impuestas por el Gobierno tienen consecuencias significativas para la aviación y para la economía del país.
Según el plan “Paso a Paso” definido por la actual administración, no se contempla un levantamiento de las restricciones de viaje hasta la última etapa de desconfinamiento. Si bien se infiere que las fronteras se abrirán en el Paso 4 de “Apertura Inicial” -pese a que las autoridades evitan hablar de ello-, el Gobierno de Chile mantendrá cuarentenas a todos quienes ingresen al país retrasando hasta nuevo aviso la reactivación completa del transporte aéreo. En el caso de los vuelos nacionales, se mantienen los permisos de viaje sólo por motivos laborales, asistencia a funerales de familiares cercanos y por razones de salud, los que deben ser demostrados ante la aduana sanitaria por parte de los pasajeros.
Para la industria aérea, es fundamental levantar las restricciones si se busca que el transporte aéreo retome gradualmente su actividad y pueda aportar a la recuperación económica del país. Considerando la existencia de controles preventivos armonizados por distintas organizaciones de aviación desarrollados bajo directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y validados por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), no hay razones para mantener medidas extremas dado que no existe evidencia científica de que la aviación sea un vehículo de contagio del COVID-19 como de cualquier enfermedad.
Fotografía portada - Simón Blaise