En paralelo con su ingreso en el mercado doméstico en Brasil, JetSMART también apuesta por establecer en el corto plazo una filial en el Perú. La intención persigue funcionar como operador local que le permitan obtener derechos de tráfico como línea aérea peruana, además de aprovechar las ventanas y características que presenta el país por la cantidad de población, tráfico turístico e importancia del avión como medio de transporte en el país por su geografía.
“Estamos iniciando ya el proceso para obtener la certificación operativa que requiere tener una línea aérea en Perú y servir localmente entre seis a nueve meses”, dice Estuardo Ortiz a El Mercurio (08/07/2020). En su opinión, la salida de Avianca como operador doméstico en este país le abre una oportunidad interesante para colocar capacidad a corto plazo y continuar con su plan de expansión por Sudamérica.
JetSMART tiene camino avanzado para ofrecer una buena conectividad con el Perú. La línea aérea dispone de cinco rutas internacionales que conectan al país con Chile, operaciones que espera reanudar a medida que se levanten las restricciones. Desde Santiago opera a Arequipa, Lima y Trujillo, mientras que desde Antofagasta y Concepción se ofrece conectividad interregional con Lima. Con tres destinos atendidos, una filial doméstica puede brindar sinergias especialmente hacia los pasajeros aumentando las posibilidades de conexión con una oferta de bajo costo. A corto plazo, también busca atender el Perú desde Argentina con el pedido de permisos para operar Buenos Aires (AEP) – Lima.
Desde los comienzos de su crecimiento internacional, la línea aérea de ultra bajo costo y tarifas bajas (ULCC, por sus siglas en inglés) de Indigo Partners, busca entrar en el mercado peruano comenzando con vuelos internacionales. Sin embargo, las limitaciones en la autorización de frecuencias por el Perú, los planes se han visto reducidos o no tienen la velocidad inicialmente esperada. Uno de los objetivos perseguidos es, por ejemplo, el tramo Calama – Cuzco para brindar a los turistas opciones de viaje más directas y sencillas.
El Perú tiene características que favorecen el ingreso de JetSMART. En primer término, posee un número similar de operadores y modelos de negocios con Chile con los cuales ya compite. Está LATAM como mayor línea aérea con su modelo híbrido, SKY y Viva Air como representantes del LCC. Se agregan las firmas de nicho como Star Perú y ATSA que podrían ser comparables a las chilenas Aerovías DAP o la desparecida ONE Airlines.
En segundo lugar, está el factor geográfico con barreras naturales que hacen del avión el principal medio de transporte. La Cordillera de los Andes que divide en tres al país (Costa, Sierra y Selva) impone que cualquier alternativa de transporte se traduzca en viajes de larga duración. Al estar las ciudades localizadas a una menor distancia, permite a las líneas aéreas operar con mayor eficiencia ya que la duración promedio de los vuelos dentro del Perú es de 45 a 50 minutos, por lo que un avión puede atender más destinos o frecuencias en el día.
La ubicación geográfica del Perú en la región es la tercera ventaja. Como operador peruano, JetSMART podría operar vuelos internacionales desde el sur de los Estados Unidos o México hasta el extremo austral del continente con su flota Airbus A320neo y A321neo, sin descartar la posibilidad de colocar algunos A321XLR en el mediano plazo, aviones que le permitirían atender rutas de hasta 8 horas de duración, permitiendo ofrecer vuelos a Nueva York o Los Ángeles.
Finalmente, el intenso tráfico turístico que posee el país y la mayor cantidad de población en comparación con Chile, representan oportunidades atractivas que atender. Por su oferta atractiva a través del precio, las LCC/ULCC demuestran que son capaces para capturar con mayor sensibilidad la demanda. Según datos de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), la aviación desempeña un rol fundamental para el desarrollo económico y social del Perú. Aporta directamente US$1,7 mil millones a su Producto Interno Bruto (PIB) a los que se agregan otros US$3,3 mil millones por el gasto que realizan los turistas.
El eventual aterrizaje de JetSMART en el Perú puede retrasar el proyecto de Brasil, según indica Estuardo Ortiz al El Mercurio. Sin embargo, no se descarta una expansión paralela dependiendo de la evolución de cada uno de los mercados, considerando que no se superponen. Con Brasil y el Perú, la ULCC tiene la capacidad para atender gran parte de Sudamérica en los próximos años.
JetSMART sigue con sus proyecciones de tener una flota de 100 aviones distribuidos en la región. Sin embargo, la crisis del COVID-19 impone el posible retraso de dos años en los planes. Para febrero 2021, la compañía espera recuperar el 60% de las operaciones que tenían en 2019. “Posiblemente, la crisis nos obligue a retrasar esa cifra en uno o dos años; tendremos que adaptar el plan, considerando una realidad sin crecimiento en 2020 y en la primera mitad de 2021”, dice su CEO.
Fotografía portada – Simón Blaise