En declaraciones a medios de prensa, el ministro de Hacienda de Chile, Ignacio Briones, asegura que el Gobierno evaluará la conveniencia y oportunidad para contribuir al éxito del proceso de reorganización y reestructuración solicitado por LATAM Airlines Group. La opinión sigue a línea de las expresiones entregadas desde el Gobierno de Chile, pero no entrega certezas respecto a futuras acciones considerando las solicitudes de ayuda que la industria aérea demandan para enfrentar la crisis que impone el COVID-19.
Según publica Emol (26/05/2020), Briones señala que la conectividad aérea forma parte de la integración humana y logística del país. “Atendido el rol central que LATAM juega a este respecto, el Gobierno espera que una reorganización de la compañía permita la continuidad operacional de a empresa”, señala. “El Gobierno evaluará la conveniencia y oportunidad para contribuir al éxito del proceso de reorganización de LATAM”.
Desde el inicio de la crisis, cuyas consecuencias más significativas se manifiestan en la paralización casi total del tráfico aéreo de pasajeros y parte de carga en todo el mundo, LATAM como otras líneas aéreas buscan sensibilizar al Gobierno de Chile respecto a la necesidad de contar con mecanismos de ayuda al transporte aéreo. Sin embargo, hasta la fecha no se conocen avances significativos, pese a las “buenas intenciones” que las autoridades chilenas declaran.
La semana pasada (La Tercera 18/05/2020), Roberto Alvo, CEO de LATAM Airlines Group, manifiesta en respuesta a un oficio de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) que “a esta fecha no existen tratativas o avances que permitan a LATAM esperar que dicho apoyo se concretará“. Lo anterior, después de que la línea aérea, siguiendo las normas de probidad y transparencia que implican, sostuvieran reuniones con autoridades del Estado.
Algo similar ocurre en Colombia, donde Aerovías de Integración Regional S.A. (LATAM Airlines Colombia), solicita al Gobierno de ese país considerar la posibilidad de ayudas financieras. Al acogerse al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de los Estados Unidos para avanzar en su reorganización y reestructuración financiera, LATAM Airlines Group indica que las entidades en Brasil continúan en conversaciones con el Gobierno con respecto a los siguientes pasos obtener apoyo financiero para las operaciones del grupo en Brasil.
Diversas opiniones consideran que las reacciones del Gobierno de Chile están “a la deriva”, son “poco claras” y hasta “vacías” frente a la urgencia que diversos sectores productivos demandan, especialmente el de las líneas aéreas y el turismo, ante la grave situación económica que enfrentan. En algunos casos, agrava el escenario impuesto por la crisis político-social del país. En ese sentido, la declaración del titular de Hacienda como de otras autoridades, es una acción oscilante que caracteriza la actual administración de Sebastián Piñera, especialmente ante los desafíos políticos y comunicacionales que enfrenta desde octubre 2019 y que, bajo el escenario actual, parece no superar.
En las conversaciones para estudiar posibles ayudas estatales a la industria aérea, la ministra de Transportes y de Telecomunicaciones (MTT), Gloria Hutt, señala la posibilidad de evaluar un plan de apoyo al sector con medidas de corto y mediano plazo. Sin embargo, cierra la posibilidad de postergar impuestos ya considerados en el presupuesto, aunque hay disposición a retrasar su pago por un periodo limitado.
En opiniones de líderes de la industria aérea local, la posibilidad de postergar cobros fiscales son acciones valorables, pero que no ayudan de manera significativa a afrontar la crisis actual del sector dado que no representan ni siquiera al 1% de los costos. Cabe recordar que mientras el transporte aéreo se encuentra paralizado y la demanda de viajes cae drásticamente, las compañías aéreas como distintas empresas proveedores continúan incurriendo en costos y obligaciones generando una falta de liquidez. Ante la emergencia, se necesitan acciones de “apoyo más concretas”, pero reconocen la fuerte presión política que impone tomar decisiones.
La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) mantiene su confianza en que la industria aérea llegará a un acuerdo con el Gobierno en la medida que trabaja para reanudar las operaciones aéreas. Peter Cerdá, vicepresidente de IATA para las Américas y el Caribe, señala que las autoridades están abiertas a las recomendaciones que se entregan y que existen “progresos”.
El transporte aéreo en Chile aporta US$7 mil millones al PIB, de los cuales US$1,9 mil millones son atribuibles al turismo. Sin ingresos y con una evidente falta de liquidez, la crisis amenaza al menos a 13.703 empleos directos de la aviación y a alrededor 57 mil puestos de trabajo indirectos, perjudicando a muchas pequeñas y medianas empresas (PYMES). IATA ha elevado su proyección de riesgo desde la segunda mitad de marzo cuando estimaba un impacto de al menos 11.474 empleos directos y 47.219 empleos indirectos.
Fotografía portada – Presidencia